martes, 11 de noviembre de 2014

Algo inesperado

Aviso: Los libros aquí transcriptos y los personajes pertenecen a Stephenie Meyer y la historia original “Reading Breaking Dawn” a Choices HP, yo solo la traduzco, todo esto es sin ánimos de lucro, solo por mero entretenimiento.

Traducción: R. R. GRANT
“Algo inesperado” Leyó Alice.
“¿Qué crees que significa?” Preguntó Edward preocupado.
“No tengo ni la menor idea, pero inesperado no es una muy buena palabra” Respondió Alice.
“¿Por qué?” Preguntó Emmet confundido para luego de unos segundos comenzar a reírse “Oh, claro. Porque es algo como… no saber, o impredecible”
“Entendemos el punto” Dijo Jasper rodando los ojos.
La fila de hábitos negros avanzó hacia mí a través de la niebla como un sudario. Percibía sus oscuros ojos relucir como rubíes de puro deseo, anhelantes de sangre.
Edward se tensó sin gustarle ni un poco eso.
Sus labios se retraían sobre sus húmedos dientes agudos, mitad rugido, mitad sonrisa.
Escuché cómo gimoteaba el niño a mis espaldas, pero no me podía girar para mirarle. Aunque estaba desesperada por comprobar que se encontraba a salvo, no podía permitirme ningún fallo de concentración en esos momentos.
Edward bajo la mirada. Estaba más que claro lo que ella quería, no importaba lo que ella dijera.
Se aproximaron de forma fantasmal con las ropas negras agitándose ligeramente por el movimiento. Vi cómo curvaban sus manos como garras del color de los huesos. Comenzaron a dispersarse para acercarse a nosotros desde todos los ángulos. Estábamos rodeados e íbamos a morir.
Y entonces, tras la explosión de luz de un rayo, toda la escena se transformó, aunque no había cambiado nada, porque los Vulturis aún nos amenazaban, en posición de ataque. Lo que realmente cambió fue el modo en que yo contemplaba la imagen, porque de repente sentí un deseo incontrolable de que lo hicieran, quería que cargaran. El pánico se transformó en un ansia de sangre que me hizo encorvarme, con una sonrisa en el rostro, y un rugido enredado entre mis dientes desnudos.
Edward se estremeció ante eso.
“Ella se ve como un vampiro allí” Dijo Emmett.
“Me pregunto qué significa eso” dijo Jasper luciendo pensativo.
“Es solo un sueño” Dijo Edward.
“Sus sueños son raros, solo eso” le recordó Jasper. “Estos son realmente importante referente a lo que pasará en el resto del libro”
“Bueno…yo no veo como esto puede ser más que un sueño” Dijo Edward. “No hay niños inmortales…y no hay manera alguna de que alguien vaya a crear uno…”
“Tal vez es solo la parte de los Vulturis que va a hacerse realidad” Dijo Emmett con entusiasmo.
Sin embargo, había otras personas que estaban pensando seriamente sobre lo que Edward acababa de decir, y colocándolo junto con los otros síntomas que Bella parecía estar teniendo. Como ella se sentía tan cansada, comía más de lo acostumbrado, incluso la forma que ella atacó a Edward parecía estar jugando algo en todo eso.  Todo tenía sentido, y sin embargo tampoco lo tenía. No podía ser posible. Ella estaba…
“No” Edward jadeó mirando a Carlisle. Pero sus pensamientos no eran los únicos que rondaban dentro de su cabeza.
“Yo creo que sí.” Dijo Carlisle y Edward se congeló…se congeló tan completamente que no se movía en lo absoluto.
“¿Qué me perdí?” Preguntó Emmett. “¿Por qué Eddy esta… congelado?”
“No tengo ni la menor idea” Dijo Alice mirando a Edward preocupada, al igual que Jasper.
“Solo continúa leyendo” Dijo Rosalie sin aliento luciendo realmente emocionada. Emoción que ella no demostraba casi nunca, esto solo hizo que Alice, Jasper y Emmett se vieran más preocupados que antes de que Edward se congelara por completo.
“Alice, sería lo mejor si leyeras la siguiente parte” Dijo Carlisle luciendo de ser posible más preocupado de lo que Edward estaba, pero ellos a pesar de todo tenían un poco de esperanza también. A su lado, Esme lucía de la misma manera.  Estaba claro que ella sabía que sucedía también.
Me incorporé de un salto, aún aturdida por el sueño. La habitación estaba a oscuras y también hacía un calor bochornoso. Tenía el pelo empapado por el sudor de las sienes y el que me corría por el cuello.
Aparté de una patada las sábanas mojadas y encontré la cama vacía.
“Bueno, por supuesto que lo estaba. Si Edward hubiera estado allí ella se hubiera sentido más comoda” Emmett rió entre dientes, pero nadie le prestó atención a él.
—¿Edward?
Justo en aquel momento, mis dedos tropezaron con algo de tacto suave, plano y rígido. Era una hoja de papel doblada por la mitad. Me llevé la nota conmigo y caminé hacia el interruptor de la luz.
En la parte exterior de la nota alguien había escrito a quién estaba dirigida: “A la señora Cullen.
Esme y Alice sonrieron ante eso, pero Rosalie y Edward seguían totalmente absortos solo queriendo escuchar que venía después de eso.
Espero que no te despiertes y notes mi ausencia, pero si fuera así, quiero decirte que volveré pronto. Me he ido al continente de caza. Vuelve a dormirte y estaré de vuelta cuando te despiertes de nuevo.
Te quiero”
Suspiré. Llevábamos allí unas dos semanas, así que debería haber contado ya con que se marchara, pero no había estado pensando en el tiempo, porque aquí parecíamos vivir al margen de él, yendo a la deriva en un estado de perfección.
Me limpié el sudor de la frente. Ahora estaba completamente despierta, aunque el reloj del tocador dijera que era más de la una. Sabía que no podría volverme a dormir tan acalorada y sudorosa como me sentía. Y eso sin mencionar el hecho de que si apagaba la luz y cerraba los ojos, estaba segura de ver aquellas figuras negras rondando en mi cabeza.
“¿Y eso es malo?” Emmett sonrió.
“Para la mayoría de las personas, sí.” Dijo Jasper. “Pero nadie espera que tú pienses eso, claro.”
Me levanté y vagabundeé por la casa a oscuras sin destino definido. Fui encendiendo luces. Me parecía tan grande y desierta sin Edward allí. Tan diferente.
Terminé mi paseo en la cocina y decidí que, quizá, lo que necesitaba era comida para consolarme.
Rebusqué por el frigorífico hasta que encontré todos los ingredientes necesarios para hacer pollo frito. El chisporroteo y siseo del pollo en la sartén resultó un sonido hogareño y encantador, que al llenar el silencio me hizo sentir menos nerviosa.
Olía tan bien que comencé a comer directamente de la sartén, quemándome la lengua mientras tanto. Al quinto o sexto bocado, sin embargo, se había enfriado lo suficiente para disfrutarlo y mastiqué más lentamente. ¿Había algo raro en el sabor?
Comprobé la carne, y estaba blanca por todas partes, pero me pregunté si estaba bien hecha. Tomé otro bocado de forma experimental y lo mastiqué dos veces. Ay, qué asco, de verdad. Me levanté de un salto para escupirlo en el fregadero. De repente el olor del pollo y el aceite frito me revolvió el estómago.
“Eso lo confirma, ¿no?” Preguntó Rosalie mirando a Carlisle, quien lucía más preocupado que antes.
“Si…eso creo” Dijo él y su voz sonó tan tranquila como siempre.
“Oh, dios… ¿Ustedes piensan..?” Exclamó Alice comprendiendo todo.
“Sí” Dijo Rosalie sonriendo. “Esto quiere decir que Edward es absolutamente perfecto para Bella… y todos sabes que ella lo es para él también”.
“¿Será que alguien podría decirme lo que está ocurriendo aquí?” Preguntó Jasper, luciendo claramente incomodo. Esto debido a que cuatro de los siete vampiros que se encontraban en la habitación estaban extremadamente preocupados. Uno estaba estático, otro estaba confundido y aturdido, y luego estaba él que estaba comenzando a sentirse como si él estuviera realmente preocupado también.
“Creemos que Bella podría estar embarazada” Rosalie sonrió ampliamente.
“Eso explicaría los sueños…” Dijo Jasper sin saber que más decir.
“¿Es eso posible?” Preguntó Emmett.
Carlisle lo miró y sus ojos estaban casi completamente en blanco. Él no lo sabía todo.  Estos libros los han demostrado en más de una ocasión, pero parecía que él ni siquiera podría buscar algo ahora, cosa que era poco común en él. “Yo…nunca oí sobre eso”
“Cierto”  Emmett tragó fuerte. No le gustaba para nada la mirada de su padre.
 Cogí todo el plato y lo tire sacudiéndolo sobre la basura; luego abrí las ventanas para dispersar el olor. Una brisa fresca se había levantado en el exterior y era agradable sentirla contra la piel.
Me encontré repentinamente agotada, pero no quería volver a la calurosa habitación, así que abrí más ventanas en el cuarto de la televisión y me tumbé en el sofá que había justo delante. Puse otra vez la película que habíamos visto el otro día y, en cuanto empezó la alegre canción inicial, me quedé dormida.
Cuando abrí los ojos de nuevo, el sol estaba ya a medio camino del horizonte, pero no fue la luz lo que me despertó. Me sentía envuelta en la frescura de sus brazos, que me estrechaban contra él. Al mismo tiempo un dolor repentino me retorció el estómago, casi como una réplica de lo que se siente cuando encajas un golpe en las tripas.
"O tal vez en el interior del intestino" Emmett bromeó ligeramente, deseando ver alguna reacción. Rosalie sonrió ante eso, pero todo el resto actuó como si no hubieran oído nada.
—Lo siento —murmuraba Edward mientras frotaba su mano helada contra mi frente pegajosa—, tanta meticulosidad con todo y no había pensado en que tendrías tanto calor cuando yo me marchara. Haré que instalen un aparato de aire acondicionado antes de que me vaya.  No me podía concentrar en lo que me decía.
—¡Perdona! —jadeé, luchando por liberarme de sus brazos.
Él me soltó de forma casi automática.
—¿Bella?
Salí disparada hacia el cuarto de baño con la mano apretándome la boca. Me sentía tan mal que ni siquiera me preocupó, al principio, que estuviera conmigo cuando me agaché sobre el váter y vomité violentamente.
—¿Bella...? ¿Qué te pasa?
No podía responder todavía. Él me sostenía lleno de ansiedad, apartándome el pelo de la cara, esperando hasta que recuperé de nuevo la respiración.
—Maldito pollo rancio —gemí.
“Sí, eso es lo que es..” Dijo Emmett riéndose entre dientes.
—¿Estás bien? —su voz sonaba muy tensa.
—Bien —repliqué con voz entrecortada—. Es sólo que me he intoxicado con la comida. No es necesario que veas esto, vete.
—Ni se te ocurra, Bella.
—Vete —gemí otra vez, luchando para levantarme y poder lavarme la boca. Él me ayudó cariñosamente, ignorando los débiles empujones que le propinaba. Después de haberme limpiado, me llevó a la cama y me sentó allí con cuidado, sujetándome entre sus brazos.
—¿Te ha sentado mal alguna comida?
—Ah, sí —grazné—. Hice un poco de pollo anoche. Sabía raro así que lo tiré, pero antes me comí unos cuantos bocados.
Me puso una de sus manos frías en la frente, y era muy agradable.
—¿Qué tal te sientes ahora?
Lo pensé durante un momento. La náusea se me había pasado tan violentamente como había venido y me sentí como cualquier otra mañana.
—Estoy bastante bien. De hecho, incluso algo hambrienta.
"Bueno, eso tiene sentido, ya que no hay absolutamente nada en tu estomago ahora " Se rió Emmett pero era el único que se reía, los demás estaban preocupados, era muy pronto para que ella tuviera nauseas.
Me hizo esperar una hora y beberme un gran vaso de agua antes de freírme unos cuantos huevos. Me encontraba perfectamente normal, aunque un poco cansada después de haberme levantado en mitad de la noche. Él puso la CNN, ya que habíamos perdido todo contacto con la realidad, tanto que podría haber estallado la Tercera Guerra Mundial sin que nos hubiéramos enterado, y me acurruqué soñolienta en su regazo.
"Sabes, me hubiera gustado haber ido a la guerra” Dijo Emmett, sabiendo que él podría haber ayudado y haber obtenido algo de diversión al mismo tiempo.
"Ahora no es el momento para eso, cariño" Dijo Rosalie.
Me aburría escuchando las noticias y me retorcí para besarle. Justo como por lamañana, un dolor agudo me atravesó el estómago cuando me moví.
“Parece como si fueras tú, Eddy. El que hace que ella se sienta enferma” Emmett se rió entre dientes.
Me arrastré lejos de Edward, con la mano apretada con fuerza contra la boca. Me di cuenta de que no llegaría a tiempo hasta el cuarto de baño, así que me dirigí hacia el fregadero de la cocina.
Él me apartó el pelo de nuevo.
—Quizá deberíamos ir a Río, a que te vea un médico —sugirió lleno de ansiedad mientras me limpiaba los labios después.
Sacudí la cabeza y me dirigí hacia el vestíbulo. Los médicos significaban agujas.
“Bueno, eso no es algo bueno de saber, Carlisle” Emmett sonrió.
"Estoy de acuerdo con ella, ella tiene un punto", dijo Carlisle, tratando de parecer normal, pero estaba claro que estaba pensando un montón de cosas más.
—Me sentiré mucho mejor después de lavarme los dientes.
Cuando mejoró el sabor de mi boca, rebusqué entre mis cosas el maletín de primeros auxilios que Alice me había preparado, lleno de cosas humanas como vendas, analgésicos y mi objetivo ahora, Pepto-Bismol. Quizá de ese modo se me asentara el estómago y Edward se quedaría más tranquilo.
“Sí, claro. Estoy seguro de que la segunda opción no sucederá en ningún momento cercano” Dijo Emmett.
"En realidad, si él reacciona como lo hace ahora, yo no estaría tan seguro," dijo Jasper observando a Edward. "Yo no le llamaría la calma, pero viendo que no siente nada…en absoluto... Es lo suficientemente cerca."
“Pensé que el estaba preocupado” Dijo Esme sonando preocupada.
“No” Dijo Jasper luciendo un poco preocupado también. “Es como si estuviera…apagado, pero estoy seguro que él estará bien dentro de poco”
Pero antes de encontrar el Pepto, hallé algo más que Alice había metido en la maleta. Cogí la pequeña caja azul y me la quedé mirando allí en mi mano, olvidándome de todo lo demás.
“Sí” Dijo Rosalie sonriendo.
“Esta bien” Dijo Jasper sonriendo, aunque él seguía mirando a Edward. El había estado algo nervioso debido a la falta de emoción de Edward. “Ahora el esta preocupado”
“Es bueno que estes aquí Jazz, porque nadie más habría sido capaz de decir si hubo un cambio” dijo Emmett, mirando a su ahora estatua hermano que seguía del mismo modo que cuando se había congelado. 
Entonces comencé a contar en mi cabeza. Una vez. Dos. Y otra vez más.
Un golpe en la puerta me sobresaltó y la cajita se me cayó de nuevo dentro de la maleta.
—¿Te encuentras bien? —me preguntó Edward a través de la puerta—. ¿Te has mareado otra vez?
—Sí y no —le dije, pero mi voz sonó estrangulada.
—¿Bella? ¿Puedo entrar, por favor? —me rogó ahora en tono preocupado.
—Va... le.
Llegó y evaluó mi postura, sentada con las piernas cruzadas al lado de la maleta, y mi expresión en blanco y ausente. Se sentó a mi lado y rápidamente me puso la mano en la frente.
—¿Qué es lo que va mal?
“Confia en mi, no quieres saberlo” Dijo Emmett.
“Pero el tiene que saberlo” Dijo Esme. “Ella necesita que él este para ella.”
“Si…incluso si él será una especie de roca” Dijo Emmett riendo entre dientes mirando a Edward mientras lo picaba con el dedo esperando algún gruñido, pero nada.
—¿Cuántos días han pasado desde la boda? —le susurré.
—Diecisiete —me contestó de forma automática—. Bella, ¿qué pasa?
Volví a contar de nuevo. Alcé un dedo para advertirle que esperara y articulé con los labios los números para mis adentros. Antes me había equivocado con los días, porque llevábamos allí más tiempo de lo que yo creía. Comencé de nuevo.
—¡Bella! —susurró en tono de urgencia—, me estás volviendo loco.
“No…creo que eso pasará despues de que ella le diga sus noticias” Dijo Emmett riendo.
Intenté tragar, pero no funcionó. Así que volví a la maleta y rebusqué por todos lados hasta que apareció la cajita azul de nuevo y la levanté en silencio. Se me quedó mirando lleno de confusión.
—¿Qué? ¿Estás intentando hacerme creer que esto que te pasa es un simple síndrome premenstrual?
Rosalie y Alice rodaron sus ojos antes eso.
—No —me las apañé para contestar sin sofocarme—, no, Edward. Estoy intentando decirte que se me ha retrasado el período cinco días.
La expresión de su rostro continuó impertérrita. Era como si no hubiera hablado.
“O… Es que se ha congelado” Se carcajeó Emmett.
—No creo que me haya intoxicado —añadí.
Él no contestó, se había convertido en una estatua.
“¡Se los dije!” Dijo Emmett carcajeandosé con fuerza. “Estoy seguro que se mantendrá así por un largo rato”
—Las pesadillas —mascullé, para mí, con voz monótona—, el sueño que tenía, los lloros, toda esa hambre... Oh, oh. «Oh.»
La mirada de Edward se había vuelto vidriosa, como si fuera incapaz de verme. La mano se me apoyó en el estómago de forma casi involuntaria, como si fuera un acto reflejo.
—¡Oh! —chillé de nuevo.
Me puse en pie tambaleándome para salir de entre las manos inmóviles de Edward. No me había quitado los pantaloncitos de seda azul y la camisola que me había puesto para dormir, así que alcé de un tirón la tela y me quede mirándome fijamente la barriga.
"Es demasiado pronto para que se note” Esme frunció el ceño.
“Pero esto no es una circunstancia normal ... y sus síntomas parecen ser más avanzados de lo que debe ser en este momento" Dijo Carlisle. "No sabemos cómo esto va a funcionar."
Un escalofrío recorrió varios de los vampiros en la habitación ante esas palabras. Todo el mundo lo sintió, a excepción de Edward que todavía estaba congelado en su preocupación. Y Rosalie, que creía de todo corazón que todo saldría bien al final.
—Imposible —susurré.
Aunque no tenía ninguna experiencia con embarazos, bebes o cualquier cosa relativa a ese mundo, no era ninguna idiota. Había visto suficientes películas y programas de televisión para saber que esto no funcionaba así. Sólo se me había retrasado cinco días. Si de verdad estaba embarazada, mi cuerpo no podría haber registrado aún ese hecho. No podía tener mareos matutinos, y desde luego, no habrían cambiado mis rutinas de alimentación y de sueño.
Y aún más claramente, no podía tener un pequeño, pero definido, bulto sobresaliendo entre las caderas.
Rosalie sonrió al mismo tiempo que el resto entró en pánico.
Giré el torso hacia delante y detrás, examinándolo desde todos los puntos de vista, como si fuera a desaparecer debido al modo en que incidía la luz. Recorrí aquel pequeño bulto casi imperceptible con los dedos, sorprendida por lo duro que se sentía bajo la piel.
Y  ante eso… Edward se estremeció… era como él.
—Imposible —repetí otra vez, porque con bulto o sin él, con período o sin período (y desde luego no lo había, porque jamás se me había retrasado ni un solo día en toda mi vida), no había forma posible de que estuviera embarazada. La única persona con la que había practicado sexo en toda mi vida era con un vampiro, hablando alto y claro.
Un vampiro que aún estaba paralizado en el suelo sin dar signo alguno de volver a moverse jamás.
“Sí, yo estaría de acuerdo con eso. " Dijo Emmett con voz temblorosa, tratando de deshacerse de su preocupación.
Así que tenía que haber alguna otra explicación, entonces. Tenía que haber algo que iba mal en mí. Alguna extraña enfermedad sudamericana con los síntomas del embarazo, sólo que acelerados...
"Buena suerte dar con algo así." dijo Emmett riendo, aunque todavía con voz temblorosa.
Y entonces recordé algo, una mañana en la que hice una exploración en internet que ahora parecía haber sucedido hace mucho tiempo. Sentada ante el viejo escritorio en mi habitación en casa de Charlie con aquella luz gris mate brillando a través de la ventana y con la vista fija en mi viejísimo ordenador ronroneante, leí con avidez una página web llamada «Vampiros de la A a la Z».
"Ella no leyó sobre ningún embarazo aquel día." Carlisle frunció el ceño.
"Ella no nos mostró todo lo que había leído ese día." Jasper señaló.
"Correcto." Carlisle suspiró.
Habían pasado menos de veinticuatro horas desde que Jacob Black, intentando distraerme con aquellas leyendas quileute en las que ni siquiera él creía, me había dicho que Edward era un vampiro.
Yo había buscado con ansiedad en las primeras entradas del sitio, dedicado al mito de los vampiros en todo el mundo. El Danag filipino, el Estrie hebreo, el rumano Varacolaci, los Stregom benefici italianos, una leyenda que se basaba en realidad en las primeras hazañas de mi nuevo suegro con los Vulturis, aunque en aquel momento yo no sabía nada de eso... Cada vez prestaba menos atención a las historias conforme se volvían menos verosímiles. Apenas recordaba vagos detalles de las últimas entradas, que parecían principalmente excusas ideadas para explicar cosas como los índices de mortalidad infantil y la infidelidad. «No, cariño, ¡no tengo una aventura! Esa mujer tan sexy que viste salir con disimulo de la casa no era más que un perverso súcubo.
"Me pregunto cuál de las hermana Denali pudo haber sido." Emmett se rió entre dientes.
“No estamos para chistes ahora Emmett” Rosalie lo dijo de manera tranquila, aunque no lo pareciera, ella era la más emocionado con esto.
¡Tengo suerte de haber escapado con vida!» Desde luego, con lo que sabía ahora acerca de Tanya y sus hermanas, sospechaba que algunas de esas historietas no habían sido otra cosa más que hechos.
Emmett se rió de eso, y pareció volver a la normalidad.
Había también algo para las señoras: «¿Cómo me puedes acusar de haberte estado engañando, sólo porque acabas de regresar de un viaje de dos años y estoy embarazada?
Fue un íncubo, que me hipnotizó con sus místicos poderes vampíricos...».
Esto formaba parte de la definición de un íncubo, su capacidad para tener hijos con su desafortunada presa.
"Hmph ... eso realmente no me ayuda en absoluto" Dijo Carlisle "pero hubiera sido bueno saber esto antes ..." Él miró a Edward, obviamente deseando poder haberle advertido sobre esto de alguna manera.
Sacudí la cabeza, aturdida, pero...
Pensé en Esme y especialmente en Rosalie. Los vampiros no podían tener hijos. Si eso fuera posible, a estas alturas Rosalie hubiera encontrado la forma.
"Tiene razón" Dijo Rosalie.
"¿Esto no te hace estar más celosa de Bella?" Preguntó Emmett.
"Increíblemente celosa" Dijo Rosalie "pero eso no importa ahora."
"Cierto" Dijo Emmett, no entendiéndole del todo, pero sólo lo dejo pasar.
El mito del íncubo no era más que una fábula.
Salvo que... bueno, había una diferencia. ¡Claro que Rosalie no podía concebir un hijo!, porque estaba paralizada en el estado en el cual había pasado de humana a inhumana y nada podía cambiar en ella. Y los cuerpos de las mujeres humanas tenían que cambiar para tener bebés. En primer lugar, estaba el cambio constante del ciclo mensual, y después las grandes transformaciones necesarias para acomodar un bebé en crecimiento. El cuerpo de Rosalie no podía cambiar.
Rosalie realmente deseaba que estas líneas de pensamientos acabaran ahora, ella realmente quería escuchar lo que sucedería a continuación.
Pero el mío podía, sí, y de hecho lo estaba haciendo. Toqué el bulto de mi barriga que no había estado allí el día anterior.
Y los hombres humanos... bueno, ellos continuaban en el mismo estado desde la pubertad hasta la muerte.
“Es verdad” Dijo Carlisle, los hombres podían ser padres a cualquier edad.
Recordé al azar una trivialidad, que había sacado de sabe Dios dónde: Charlie Chaplin estaba en los setenta cuando tuvo a su hijo más pequeño. Los hombres no han de soportar dificultades como los años o los ciclos de fertilidad para poder tener hijos.
Claro, ¿cómo había nadie de saber si los hombres vampiro podían tener hijos, cuando sus compañeras no podían? ¿Qué vampiro en este mundo tendría el autocontrol necesario para probar esa teoría con una mujer humana? ¿O la inclinación a hacerlo?
Sólo se me ocurría el nombre de uno.
No ..." Dijo Edward con una voz que dejó en claro lo que pensaba sobre eso. Sentía que era el peor monstruo en el mundo por hacer eso.
"Eres tan negativo todo el tiempo" Rosalie espetó. "Ni siquiera sabes lo que va a suceder."
Edward todavía no era capaz de moverse, pero era una buena cosa. Si él alzaba la mirada, aterrorizaría a todos debido a la expresión que tenía. 
La mitad de mi cabeza estaba intentando organizar hechos, recuerdos y compaginarlos con las especulaciones, mientras que la otra mitad, la que controlaba la capacidad de mover mi cuerpo, estaba tan aturdida que no era capaz de desempeñar ni la operación más sencilla. No podía mover los labios para hablar, aunque quería pedirle a Edward que me explicara por favor lo que estaba pasando.
"Lo siento, pero no sabe más de lo que tú sabes" Dijo Emmett, de nuevo  su estado de ánimo se vió afectado por Edward.
Necesitaba regresar adonde él estaba sentado, tocarlo, pero mi cuerpo no seguía mis instrucciones. Sólo podía mirar a mis ojos atónitos en el espejo, mientras mis dedos apretaban con cuidado la pequeña hinchazón de mi vientre.
Y entonces, como había sucedido en la vivida pesadilla que había padecido la noche anterior, la escena se transformó de repente. Lo que veía en el espejo tenía unaspecto del todo diferente, aunque en realidad nada era diferente.
Lo que cambió todo fue sólo un suave y pequeño golpecito que chocó contra mi mano, desde dentro de mi cuerpo.
Rosalie sonrió, con una mirada nostálgica. Sí, se notaba que Bella iba a estar en el lado correcto allí.
Al mismo tiempo, el móvil de Edward sonó un tono agudo y exigente. Ninguno de los dos nos movimos. Sonó una y otra vez. Intenté dejar de escucharlo mientras presionaba los dedos contra mi barriga, esperando. En el espejo la expresión de mi rostro ya no era de perplejidad, sino expectante. Apenas noté las lágrimas silenciosas y extrañas que comenzaron a manar de mis ojos, y a correr por mis mejillas.
El teléfono siguió sonando. Deseaba que Edward contestara de una vez, porque yo estaba ensimismada en el momento que estaba viviendo, quizás el más importante de mi vida.
Rosalie lucía algo triste por esto, celosa por ese gran momento que ella nunca podría tener. Esme, también se veía triste, aunque la su tristeza era debido al hecho de que ella había vivido ese momento...
¡Ring! ¡Ring! ¡Ring!
Al final el fastidio pudo con todo lo demás. Me arrodillé al lado de Edward y noté que lo hacía con más cuidado, mil veces más consciente del modo en que percibía mis movimientos; rebusqué por sus bolsillos hasta que encontré el teléfono. Casi esperé que me lo arrancara de las manos para contestar él mismo, pero continuaba perfectamente inmóvil.
Reconocí el número y pude adivinar con facilidad por qué estaba llamando.
—Hola, Alice —le dije. Mi voz no había mejorado mucho, así que me aclaré la garganta.
—¿Bella? ¿Bella, te encuentras bien?
“Me prengunto que viste..” Dijo Jasper mirando a su esposa.
“No luce como sí hubiera visto que fuera a pasar… sino más bien que sé que algo está pasando” Dijo Alice luciendo más preocupada que antes. 
—Ah, sí. Mmm. ¿Está Carlisle ahí?
—Sí, aquí está. ¿Cuál es el problema?
—No, no estoy al cien por cien... segura...
—¿Está bien Edward? —me preguntó recelosa. Oí cómo llamaba a Carlisle apartándose del teléfono y luego siguió preguntando de forma exigente, «¿por qué no ha cogido el teléfono?»
Alice se estremeció ante eso. Ella pensaría lo peor pasó, ya que Edward nunca permitía que el teléfono sonara mas de una vez antes de contestar.
…aun antes de que pudiera contestar su primera pregunta.
—No estoy segura.
—¿Bella, qué está pasando? Sólo he visto...
—¿Qué es lo que has visto? —Se hizo un silencio.
—Ya ha llegado Carlisle —repuso al fin.
"¿Qué has visto?" Jasper preguntó con impaciencia mirando al libro.
“Se supone que esa es mi línea" Emmett hizo un mohín.
Sentí como si me hubieran inyectado agua helada en las venas. Si Alice hubiera tenido una visión mía con un niño de ojos verdes y rostro de ángel en los brazos, me habría preguntado algo al respecto, ¿no?
"Sí" respondió Rosalie con un toque de preocupación. "Pero eso no quiere decir que esto es malo... Alice solo no lo sabe todo."
"Vaya, gracias," Alice trató de sonar molesta, pero en verdad, no era más que la esperanza de que Rosalie estuviera en lo cierto.
Mientras esperaba, en el segundo que le llevó a Carlisle hablar, la visión que había imaginado para Alice bailoteó detrás de mis párpados. Un diminuto y bello bebé, incluso más bello aún que el niño de mis sueños, un diminuto Edward en mis brazos. Una cierta calidez me inundó las venas, alejando la frialdad.
"Bueno, parece que a ella ya le encanta el bebé" Emmett sonrió.
"Eso no es bueno" Suspiró Edward.
"Por supuesto que es bueno" dijo Rosalie. "Una madre debe vincularse con su bebé tan pronto como sea posible."
Edward le lanzó una gélida mirada que hizo que ella sintiera miedo a causa de todas las emociones que parecían estar en guerra en el rostro de su hermano.
"Va a estar bien, Edward. Lo sé." Rosalie le aseguró.
"Sí" dijo Alice de repente. "Es como dijo Carlisle. No debes juzgar las cosas hasta saber todos los hechos."
"¿De verdad crees que eso podría estar bien?" Edward ahora estaba mirando a Alice.
"No puedes decir si es... si todo sale bien, que esto no sería exactamente lo que quieres" dijo Alice.
"Sí," dijo Carlisle, luciendo esperanzado ahora. "Sí. Alice tiene razón. Esto podría ser lo imposible ..."
"Ella .. esto podría ser ... pero ..." Edward tartamudeó confuso ahora.
"Sólo tienes que mantener tu mente abierta, Edward", Carlisle calmado.
—Bella, soy Carlisle. ¿Qué pasa?
—Yo... —no sabía qué contestarle. ¿Se reiría él de las conclusiones a las que había llegado, pensaría que estaba loca?
"No, yo no pensaría eso" dijo Carlisle, volviendo a ser el mismo. Estaba poniendo toda su fe en el hecho de que todo iba a salir bien ahora.
"Sí, él podría pensar en una manera mejor de decirlo” Emmett se rió entre dientes.
¿Era sólo que estaba teniendo otro de esos sueños en color?—. Estoy un poco preocupada por Edward... ¿Pueden entrar los vampiros en estado de shock?
—¿Está herido? —la voz de Carlisle sonó repentinamente urgente.
—No, no —le aseguré—. Sólo... es efecto de la sorpresa.
—No lo entiendo, Bella.
—Creo... bueno, creo que... quizás... es que yo podría estar... —Inhalé profundamente—. Tal vez esté embarazada.
"Y ahí va otro vampiro en shock” Emmett se rió entre dientes
Como para reforzar mi afirmación, sentí otro golpecito en el abdomen. Mi mano voló hacia allí.
Rosalie sonrió a pesar de la gélida mirada que su hermano le daba al libro.
Después de una larga pausa, el entrenamiento médico de Carlisle entró en acción.
—¿Cuándo fue el primer día de tu último ciclo menstrual?
—Dieciséis días antes de la boda. —Había hecho los cálculos mentales matemáticos las veces suficientes para poder contestar con certeza.
—¿Cómo te sientes?
—Extraña —le conté, pero la voz se me quebró y otro hilo de lágrimas comenzó a descender por mis mejillas—. Esto te va a sonar como una locura... Mira, sé que es demasiado pronto para esto. Quizás es que me he vuelto loca. Pero tengo sueños muy raros y tengo hambre a todas horas, y no quiero más que llorar, y vomitar y... y... te juro que algo se me ha movido justo ahora dentro de mi.
"Tal vez es una lombriz" Dijo Emmett y todos en la sala se le quedaron mirando. "Está bien, lo siento."
La cabeza de Edward se alzó de repente. Suspiré aliviada.
“Oh, genial. Edward se despertó. Ahora veamos que tan loco se pone” Dijo Emmett bastante animado.
Edward extendió la mano para que le diera el teléfono, con el rostro pálido y endurecido.
—Mmm, creo que Edward quiere hablar contigo.
—Dile que se ponga —contestó Carlisle con voz contenida.
No estaba segura del todo de que Edward pudiera hablar, pero le entregué el móvil. Lo apretó contra su oreja.
—¿Eso es posible? —susurró él.
Escuchó durante un largo rato, mirando de forma inexpresiva hacia la nada.
—¿Y Bella? —preguntó y me envolvió con su brazo mientras hablaba, apretándome contra su costado.
Escuchó durante lo que pareció un rato muy largo y después dijo:
—Sí, sí, lo haré.
“Creo que el Carlisle del libro querría que regresaran a casa” Dijo Carlisle.
“Esa sería la mejor idea” Dijo Edward. “Ella necesita tus cuidados”
Rosalie rodó sus ojos a ambos, tendiendo un mal presentimiento sobre todo esto.
Apartó el móvil de su oído y presionó el botón de apagado. Sin detenerse marcó un número nuevo.
—¿Qué ha dicho Carlisle? —le pregunté con impaciencia. Edward respondió con voz inanimada.
—Cree que estás embarazada.
Las palabras enviaron un cálido estremecimiento a través de mi columna. Aquel pequeño «pateador» se removió en mi interior.
“Pequeño pateador” Emmett se rió. “Me gusta”
—¿A quién estás llamando ahora? —pregunté mientras volvía a ponerse el teléfono en el oído.
—Al aeropuerto, volvemos a casa.
Edward estuvo al teléfono durante más de una hora sin parar. Supuse que estaría arreglando nuestro vuelo de regreso, pero no podía estar segura porque no hablaba en inglés. Sonaba como si estuviera discutiendo, habló entre dientes durante un buen rato.
"Tampoco me gusta tratar con las aerolíneas" dijo Emmett
Mientras discutía, iba haciendo las maletas. Revoloteaba por la habitación como un tornado furioso, pero dejando orden en vez de destrucción a su paso.
"Un tornado inverso, entonces" Emmett se rió entre dientes.
"¿Qué pasa contigo?" Preguntó Rosalie. Estaba siendo un poco más tonto ​​en este momento de lo que normalmente era.
"Está tratando de mantener el buen humor" se quejó Edward. "Y no está funcionando."
"Bueno, ahora es el momento de sacudirse lo desagradable" Emmett se encogió de hombros.
Arrojó un puñado de ropas mías sobre la cama sin mirarlas, así que supuse que era hora de vestirme. Él continuaba en plena controversia mientras yo me cambiaba, gesticulando con movimientos repentinos y agitados.
Cuando ya no pude soportar más la violenta energía que irradiaba, abandoné la habitación en silencio. Su concentración maníaca hacía que me estuviera mareando, no como con aquellas náuseas matutinas, sino de una forma más desagradable. Esperaría en cualquier lugar a que se le pasara ese humor. No podía hablar con ese concentrado y helado Edward que, la verdad, me asustaba un poco.
"Bien" murmuró Rosalie. Ella quiere que Bella esté bajo su guardia.
Una vez más, terminé en la cocina. Había un paquete de galletitas saladas en el armario. Comencé a masticarlas de forma ausente, mirando por la ventana hacia la arena, las rocas, los árboles y el océano, que todavía relucían bajo el sol.
Alguien me dio una ligera patadita.
—Ya lo sé —comenté—, yo tampoco me quiero ir.
"Oh, ella está hablando para sí misma" dijo Emmett.
"No, no con ella misma" Rosalie sonrió.
Me quedé mirando por la ventana durante un momento, pero el «pateador» no contestó.
"Bueno, eso es grosero, pequeño pateador”  Emmett frunció el ceño.
“No te metas con el bebe” Rosalie le gruño dándole un golpe en la nuca.
—No lo entiendo —murmuré—. ¿Qué es lo que va mal?
Era del todo sorprendente, incluso hasta el punto de dejarme atónita. Pero ¿malo? No.
"Nunca estamos de acuerdo en nada" Se quejó Edward, luciendo triste de nuevo.
"Y ella es quien generalmente lleva la razón" Dijo Rosalie.
“Espero que eso sea cierto esta vez" Suspiró Edward.
¿Entonces por qué estaba Edward tan furioso? Él era quien en realidad había estado más que dispuesto a una boda de penalti.
Rosalie levantó una ceja mirándolo.
"Podría matarla ... podría ser un monstruo" Dijo Edward.
"Podría ser” Dijo Rosalie.
"Sabes Edward, te gusta preocuparte" Dijo Alice. "Y creo que deberías estarlo" Añadió rápidamente cuando Edward la miró como si ella lo estuviera traicionando. "Pero al mismo tiempo, espero que no tengas que hacerlo”
"Sí" Edward suspiró, bajando la cabeza colocándola entre las manos.
Intenté razonarlo.
Quizá no era tan raro que Edward quisiera que nos fuéramos a casa derechos.
Seguramente deseaba que Carlisle comprobara y se asegurara de que mi suposición era cierta, aunque en realidad, a estas alturas a mí no me quedaba ninguna duda. Probablemente, lo que querrían estudiar también era por qué estaba ya tan embarazada, con el bulto, las pataditas y todo lo demás. Eso no era normal.
"No" Carlisle estuvo de acuerdo, "pero no creo que sea tan inocente como parece."
Una vez que me puse a pensar en ello, estuve segura de comprenderlo. Debía de estar inquieto por el bebé,…
Edward alzó la mirada antes eso, ante la expectativa que Bella hacia el Edward del libro y sabía que no era eso lo que estaba sintiendo. Pero debería. Si el bebé realmente era lo que pensaba Bella que era... él debería estar preocupado por el bebé también.
…aunque aún no le había dado ningún ataque de esos suyos de preocupación. Mi cerebro trabajaba de un modo más lento que el suyo,..
"Bueno, en realidad, yo creo que vas un poco mas por delante de él en este momento " Dijo Jasper.
..porque todavía estaba prendido en la maravilla de la imagen que había conjurado antes: el niño diminuto con los ojos de Edward, verdes como los había tenido cuando era humano, acurrucado feliz y hermoso en mis brazos. Esperaba que tuviera el mismo rostro de Edward, sin ninguna interferencia del mío.
"Eso no es lo que yo espero," dijo Edward, tratando de pensar en el bebé que él realmente quería con Bella. Permitirse aquel pensamiento le llevó por un momento... no estaba seguro si pudiera ser el mismo más tarde ... Ella estaba bien ahora... pero estaba seguro ... no, piensa en el bebé. "Yo preferiría que tuviera los ojos marrones ... y si se pareciera a Bella sería bueno también.."
"Sabes, tengo la sensación de que va a ser una niña" Dijo Jasper repente.
"¿Por qué?" Preguntó Emmett.
"Bueno, ella sigue mencionando a un niño... lo que significa que tiene que ser una niña” Jasper se encogió de hombros.
"Bien, nuestra apuesta es habitual" Dijo Emmett.
"Genial... Podría usar esto para ayudar a pagar por la casa," Dijo Jasper.
"Como si tu fueras a ganar” Emmett rodó los ojos.
"Confía en mí... Lo haré” Dijo Jasper.
"Maldición..." Emmett hizo un mohín.
"¿Qué pasa?" Jasper preguntó ante el repentino cambio en el comportamiento de Emmett.
"Sería mucho mejor si es una niña" Emmett suspiró. "Me refiero a pensar en lo que Eddy tendría que pasar por si tiene una niña."
Varias personas resoplaron ante eso.
"Bueno, entonces es una buena cosa, apuesto a que será una niña” Jasper se rió entre dientes. "Él va a preocuparse tanto..."
"Y ni que pensar cuando ella sea lo suficientemente mayor como para las citas..." Emmett añadió riendo, como todo el mundo a excepción de Edward.
Resultaba divertido ver lo decisiva y enteramente necesaria que se había vuelto esta visión. Ese primer toque ligero había cambiado todo mi mundo. Donde antes sólo había habido una cosa sin la que no podía vivir, ahora había dos. No era como si me hubiera dividido entre los dos, no era que hubiera repartido mi amor. Era más como si mi corazón hubiera crecido, se hubiera hinchado al doble de su tamaño, y hubiera llenado ya todo ese espacio extra. Un cambio vertiginoso.
Esme sonrió ante eso apoyada de Carlisle. “Ella va a ser una excelente madre”
Antes tampoco había comprendido el dolor y el resentimiento de Rosalie. Nunca me había imaginado a mí misma en el papel de madre y jamás lo había deseado. No había querido engatusar a Edward diciéndole que no me preocupaba el no poder tener hijos con él, la verdad era que ni siquiera me lo había planteado. Los niños, en abstracto, jamás me habían atraído. Me parecían criaturas chillonas, siempre chorreando alguna porquería,…
“¿Qué fue eso, Esme?” Emmett se rió  entre dientes.
“Silencio” Esme lo regañó.
…y además nunca había tenido mucho contacto con ellas. Cuando soñaba en que Renée me trajera algún hermanito, siempre me imaginaba un hermano mayor, alguien que me cuidara, y no al revés.
"Pero ella se hizo cargo de sus padres todo el tiempo," dijo Emmett.
 Pero este niño, el hijo de Edward, era una historia completamente distinta.
"Eso pasa a menudo, cuando estás con el hombre que amas” Dijo Alice.
"¿Cómo sabes eso?" Preguntó Rosalie. "Pensé que nunca pensaste sobre eso."
"Es por todos los libros de romance que lee” Dijo Edward.
"Cierto.." Rosalie puso los ojos en blanco y Alice se encogió de hombros.
Le quería como quería aire para respirar. No como una elección, sino como una necesidad.
Quizá todo se debía a que siempre había tenido muy poca imaginación. Quizá también ése era el motivo por el que me había resultado imposible imaginar que me gustaría estar casada hasta que lo estuve, y quizá también por eso había sido incapaz de ver que quería un bebé hasta que estuvo en camino...
"Ah, ella le gusta estar casada"  Alice sonrió. "Eso incluye a la boda, también" Afirmo con tono definitivo.
Mientras ponía la mano en mi barriga, esperando la siguiente patada, las lágrimas se deslizaron de nuevo por mis mejillas.
—¿Bella?
Me volví, algo recelosa debido al tono de su voz. Era demasiado frío, demasiado cauteloso y la expresión de su rostro acompañaba a la voz, vacía e inexpresiva.
Y fue entonces cuando se dio cuenta de que estaba llorando.
—¡Bella! —Cruzó la habitación como un rayo y puso sus manos alrededor de mi rostro—, ¿te duele algo?
—No, no...
Me estrechó contra su pecho.
—No tengas miedo, llegaremos a casa en dieciséis horas. Estarás bien. Carlisle estará preparado cuando lleguemos y nos haremos cargo de esto y tú estarás bien, muy bien.
Rosalie miró a Edward y él la miro de vuelta con una expresión extraña en el rostro. Él estaba a la defensiva y avergonzado al mismo tiempo.
"Bueno, esto es sin duda es nuevo” Dijo Jasper. “Un sentimiento incomodo… como todos los otros sentimientos encontrados que has estado  teniendo."
—¿Hacernos cargo de esto? ¿A qué te refieres?
Se apartó y me miró directo a los ojos.
—Vamos a sacar a esa cosa de ahí antes de que pueda herirte. No te asustes. No dejaré que te haga daño.
"¿Cosa?” gruño Rosalie “¡¿COSA?!”
Edward tenía sentimientos encontrados, desde vergüenza, enojo, desconcierto hasta la más pura preocupación.
— ¿Esa «cosa»? —pregunté con un jadeo.
Apartó la mirada apresuradamente de mí, y la dirigió hacia la puerta principal.
—¡Maldita sea! Se me olvidó que Gustavo venía hoy. Me desharé de él y volveré. — Y salió disparado de la habitación.
"Que bien, una distracción," dijo Rosalie. Ahora Bella tendría tiempo para calmarse antes de que Edward viera lo que estaba sintiendo realmente.
"Y después, ¿qué?" Preguntó Emmett. "Ella no puede mantener esto lejos de él por siempre."
"Tienes razón" Dijo Rosalie. "De alguna manera ella va a tener que hacerme saber cómo se siente."
Me agarré a la encimera en busca de apoyo porque tenía las rodillas temblonas.
Edward había llamado «cosa» a mi pequeño «pateador».
"¿Cómo te atreves?" Emmett se rió pero se detuvo ante la mirada fulminante de Rosalie.
Y decía que Carlisle me lo sacaría.
—No —susurré.
Me había equivocado, a él no le preocupaba el bebé en absoluto, porque quería hacerle daño. Aquella hermosa imagen de mi mente cambió de pronto convirtiéndose en algo sombrío. Mi pequeño bebé lloraba y mis débiles brazos no bastaban para protegerle...
"Parece que no hacen más que molestarse en este libro” Dijo Emmett.
¿Qué podía hacer? ¿Cómo iba a ser capaz de razonar con ellos? ¿Y qué pasaría si no lo conseguía? ¿Explicaría esto el extraño silencio de Alice al teléfono? ¿Era eso lo que ella había visto, que Edward y Carlisle mataban a mi pálido y perfecto bebé antes de que pudiera vivir?
Todo el mundo se estremeció ante ese pensamiento.
"No puedes…" Rosalie siseó.
"Yo no soy el Edward del libro" Edward le recordó. "No los tengo a todos allí para decirme que las cosas tienen la oportunidad de ser mejor... y yo todavía estoy indeciso sobre todo esto... él está en el infierno ahora mismo."
"Pero no puedes…" Repitió Rosalie, suavemente esta vez.
—No —susurré de nuevo, con la voz más firme. Eso no podía ser. Yo no lo iba a permitir.
"Entonces no va a suceder" Dijo Alice.
Escuché a Edward hablando de nuevo en portugués y discutiendo otra vez. Su voz se acercaba y le oí gruñir de pura desesperación. Entonces oí la otra voz, baja y tímida, la voz de una mujer.
Entró en la cocina delante de ella y se dirigió derecho hacia mí. Me limpió las lágrimas de las mejillas; luego murmuró en mi oído a través de la fina y tensa línea de sus labios.
—Insiste en dejarnos la comida que ha hecho, la cena. —Si hubiera estado menos tenso y menos furioso, habría puesto los ojos en blanco—. Es únicamente una excusa, lo que quiere es asegurarse de que aún no te he asesinado —dijo con la voz fría como el hielo.
Edward bajó la cabeza, sabiendo que el Edward del libro estaba pensando... un pensamiento que solo él podría tener. Ese pensamiento no le ayudó en absoluto.
Kaure dio la vuelta a la esquina nerviosa, con un plato cubierto en las manos.
Hubiera deseado poder hablar un poco de portugués, o que mi español fuera menos rudimentario, para poder agradecerle a esta mujer que se hubiera atrevido a sufrir la ira de un vampiro sólo por comprobar que yo estuviera bien.
"Una mujer muy amable y valiente" Dijo Esme.
Sus ojos se movieron inquietos del uno al otro. Le vi medir el color de mi rostro, la humedad de mis ojos. Puso el plato en la encimera murmurando algo que no entendí.
Edward le replicó con brusquedad, y nunca antes le había visto comportarse con tan poca educación. Ella se volvió para marcharse, y el revoloteo de su falda larga empujó el olor de la comida hacia mi rostro. Era fuerte: cebollas y pescado. Me entraron náuseas y me giré hacia el fregadero.
"Sí, estoy contigo, hermana" Dijo Emmett, le gustaba la idea de llamar a Bella “hermana”.
Sentí las manos de Edward sobre mi frente y escuché su murmullo tranquilizador a través del rugido de mis oídos. Sus manos desaparecieron durante un segundo y oí el golpe de la puerta del frigorífico.
Gracias al cielo, el olor desapareció con el sonido y las manos de Edward me refrescaron de nuevo el rostro pegajoso. Todo se me pasó con rapidez.
Me limpié la boca en el grifo mientras él me acariciaba un lado de la cara. Sentí un tímido golpecito en mi útero.
«Todo va bien, estamos bien», pensé en dirección al bulto.
"Esto tiene que salir bien” murmuro Rosalie.
Edward me dio la vuelta, abrazándome hasta que reposé la cabeza sobre su hombro. Mis manos, de forma instintiva, se doblaron sobre mi barriga.
Escuché un ligero jadeo y levanté la mirada.
La mujer aún estaba allí, dudando en la entrada con las manos extendidas a medias como si estuviera buscando alguna manera de ayudarme. Sus ojos se habían quedado clavados en mis manos, abriéndose de pronto por la sorpresa, al igual que su boca.
"Bueno, parece que ella lo sabe ahora" Dijo Emmett.
"Tu sabes que ese gesto debería haberte hecho darte cuenta de que tú y Bella no están en la misma página de todo este asunto” Dijo Jasper. "Eso fue definitivamente una reacción maternal."
"Creo que he tenido demasiado en mi mente" Suspiró Edward.
Entonces Edward dio también un grito ahogado y, de repente, se volvió para enfrentarse a la mujer, empujándome ligeramente detrás de su cuerpo. Su brazo envolvió mi torso como si me estuviera sujetando a su espalda.
De súbito, Kaure le gritó, en voz muy alta, con furia, mientras sus palabras ininteligibles volaban por la habitación como cuchillos. Alzó su pequeño puño en alto y dio dos pasos hacia delante, sacudiéndolo en dirección a él. A pesar de su ferocidad, era fácil ver el terror retratado en sus ojos.
Edward dio también otro paso hacia ella, y yo me aferré a su brazo, asustada por la mujer. Pero cuando ella interrumpió su parrafada, la voz de él me cogió por sorpresa, en especial considerando lo desagradable que había estado con ella antes de que hubiera empezado a chillarle. Hablaba ahora en voz baja, como si estuviera suplicando. No sólo eso, sino que el sonido era diferente, más gutural, sin la misma cadencia. Pensé que, en ese momento, ya no estaba hablando portugués.
“¿No crees que…que ella podría saber algo?” Dijo Edward mirando a Carlisle de manera esperanzada.
“No lo se..” Respondió Carlisle. “Pero ciertamente parece que si”
Durante un instante, la mujer se le quedó mirando maravillada y después entrecerró los ojos mientras ladraba una larga pregunta en la misma lengua extraña.
Observé cómo el rostro de Edward se volvía más triste y serio, y asentía una vez.
Ella dio un rápido paso atrás y se santiguó.
Él se le acercó haciendo gestos en mi dirección y después descansó la mano en mi mejilla. Ella replicó enfadada, moviendo las manos de forma acusadora hacia él, y después gesticuló de nuevo. Cuando terminó, él le suplicó otra vez con la misma voz baja y llena de urgencia.
La expresión de ella cambió, y se le quedó mirando con la duda reflejada en el rostro mientras le replicaba; sus ojos a veces se dirigían rápidamente hacia mi cara confundida. Él dejó de hablar y ella pareció estar deliberando sobre algo. Nos miró al uno y al otro varias veces, y dio un paso hacia delante, creo que de modo inconsciente.
Hizo un movimiento con sus manos, realizando un gesto mímico como de un balón sobresaliendo de su estómago. Me la quedé mirando, porque parecía que sus leyendas sobre el predador bebedor de sangre incluían eso también. ¿Sabría ella algo sobre lo que estaba creciendo dentro de mí?
“Eso es lo que todos queremos saber” Dijo Emmett.
Caminó unos cuantos pasos hacia delante de forma deliberada ahora y preguntó con unas cuantas frases cortas, a las que él respondió muy tenso. Entonces fue él quien preguntó, una sola cuestión muy breve. Ella dudó y después sacudió pesadamente la cabeza. Cuando él habló de nuevo, su voz expresaba una agonía tal, que alcé la mirada hacia él, sorprendida y asustada. Su rostro se retorció congestionado por la pena.
En respuesta, ella caminó con lentitud hacia delante hasta que estuvo lo suficientemente cerca para poner su mano diminuta sobre la mía, sobre mi barriga. Sólo dijo una palabra en portugués.
—Morte —dijo, suspirando.
"¡No!" Edward gritó, tragando saliva.
"Es una leyenda, Edward" Dijo Carlisle con voz suave. "Tú sabes que ese es por lo general el final de todas nuestras leyendas, pero eso no quiere decir que sea verdad... o que no vamos a hacer algo para cambiar eso, incluso si es verdad."
"Correcto" Dijo Edward, devastada de nuevo.
Entonces se volvió, con los hombros hundidos, como si la conversación la hubiera hecho envejecer y abandonó la habitación.
Sabía bastante español para extrapolar y comprender esa palabra.
Edward se quedó paralizado de nuevo, con la mirada fija en el lugar por donde ella había salido con una expresión torturada en el rostro. Unos cuantos minutos más tarde, escuché encenderse el motor de un bote y luego desvanecerse en la distancia.
Edward no se movió hasta que me dirigí al baño, y entonces puso una mano sobre mi hombro.
—¿Adonde vas? —susurró con una voz llena de dolor.
—A lavarme otra vez los dientes.
—No te preocupes por lo que ha dicho. No son nada más que leyendas, viejas mentiras para entretener a la gente.
“No creo que Carlisle lo hubiera dicho de una mejor manera que esa” Emmett sonrió satisfecho.
"Y yo no creo que ella es la única a la que hay que convencer allí" agregó Jasper
—No he entendido nada —le repliqué, aunque eso no era del todo verdad.
Como si yo pudiera descartar algo por el hecho de que fuera una leyenda. Mi vida estaba tan rodeada de leyendas por todas partes... y todas ellas eran ciertas.
"Me gustaría que no ella no hubiese pensado en eso" Carlisle suspiró mientras notaba que Edward lucía aún peor que antes.
—Ya he guardado tus cosas en la maleta, te lo traeré  —Caminó delante de mí en dirección al dormitorio.
—¿Nos marchamos pronto? —le pregunté a sus espaldas.
—En cuanto estés lista.
Esperó a que terminara para guardar de nuevo mi cepillo de dientes, caminando lentamente alrededor de la habitación, y se lo di en cuanto acabé.
—Llevaré el equipaje a la lancha.
—Edward...
Él se volvió.
—¿Sí?
Yo dudé, intentando encontrar alguna excusa para poder quedarme unos segundos a solas.
—¿Te importaría... que nos lleváramos algo de comida? Ya sabes, por si me entra hambre otra vez.
—Claro —replicó, con los ojos repentinamente dulces—. No te preocupes por nada. Llegaremos al lado de Carlisle en unas cuantas horas, la verdad, y pronto todo habrá terminado.
“No… No creo que eso vaya a suceder” Dijo Emmett
Yo asentí con la cabeza, porque no confiaba en mi voz.
Él se volvió y salió de la habitación, con una maleta enorme en cada mano.
Me giré y salí disparada hacia el teléfono que él se había dejado en la encimera.
Era muy raro que a Edward se le olvidara algo, como que Gustavo estaba a punto de llegar, o el móvil que se había dejado allí. Estaba tan nervioso que apenas era él mismo.
Lo abrí y busqué entre los números de la agenda. Me alegró que tuviera los sonidos apagados porque temía que pudiera pillarme. ¿Estaría aún en la lancha o ya de vuelta? ¿Me escucharía desde la cocina si hablaba entre susurros?
Encontré el número que quería, uno que no había usado nunca antes en mi vida.  Presioné el botón de llamada y crucé los dedos.
—¿Diga? —contestó la voz que sonaba como campanillas de viento doradas.
—¿Rosalie? —murmuré—. Soy Bella. Por favor, tienes que ayudarme.
"Bueno, ¡eso es simplemente genial!" Rosalie sonrió.
"Espero que sea así" dijo Edward. "Y si todo sale bien, te daré todo lo que quieras."
"Todo lo que yo quiero es que esto suceda en nuestra realidad" dijo Rosalie.
"Si todo sale bien, eso es lo que yo quiero también" coincidió Edward, sus ojos lucieron esperanzados y preocupados al mismo tiempo.
"Ese es el final del capítulo" dijo Alice. "¿Estás preparado para leer Edward?"
 "No” Dijo Edward. "Yo no creo que pueda soportar el próximo capítulo… o capítulos"
"Sí, lo entiendo" Dijo Emmett, dándole una palmada en la espalda para luego alcanzar el libro, pero no estaba allí.
"Creo que yo voy a leer a continuación” Dijo Rosalie con el libro en la mano.
"Pero yo estoy después de Edward" Se quejó Emmett.
"Pero de esta manera yo tomaré su lugar ... él no va a ser capaz de leer durante un tiempo," dijo Rosalie.
"Pero ..." Emmett hizo un mohín.
"Te prometo que haré que valga la pena si me dejas leer” Dijo Rosalie, sonriéndole de la forma que él amaba... eso siempre significaba algo bueno.
"Está bien" Sonrió Emmett accediendo "Eso me parece justo."


¡YEEES!
He terminado, en tu cara Blogger desgraciado!!!

Muchas gracias a R.R. Grant por este capitulo, que nos emociono a todas, jajajajja y mas a ella por poder traducirlo

Despues de idas y venidos Leyendo Amanecer es un hecho damas y caballeros, ahora solo queda esperar que lo disfruten, que comenten, y que organizemos una fiesta para las chicas que me ayudan "Mis traductoras"!
Las quiero chicas, gracias por ayudarme con esto <3


Pasando al capitulo!
"La pequeña pateadora esta en el horno señores! 
jajajjajajaja
Cuando lo leí por primer vez fue en el trasporte regresando a mi casa de la secundaria.
Y no pude evitar ponerme a llorar cuando Edward le dice "Cosa" al bebe!!!


Yo lloraba y le decía al chico de a lado: Le dijo Cosa, el idiota le dijo cosa.
Y así segui moqueando sin leer más hasta que llegue a mi casa y pude seguir leyendo, xD
Me encanta esto de recordar mis tiempos de lectura :D

Y eso es todo, no habrá mas capitulos hasta el año que viene.
Así que me despido chicas, que tenga una buena navidad y año nuevo!!
Así queeee!!!
Nah, mentira! Era broma, jajajjajaja


Espero que dentro de dos semanas o tres tengamos nuevos capitulos, nunca se sabe conmigo xD

Nos leemos despues *.*/

Cary0605


17 comentarios:

Anónimo dijo...

OMFG llore mucho cn el estupido de edward, y cuando me estaba calmando y pusieeste q esto era todo por este año casi llore denuevo eres mala cary!!! Gracias a ti y a tus grandiosas traductoras por los capitulos y ojala sigas luega saludos :)

XOXO

Angie

Unknown dijo...

wahhh!!! me encanto!!! y me encanto mas la actitud de Edward.. no completamente de acuerdo pero no esta diciendo definitivamente no... al menos en este capitulo... veremos los demás... creo que ya no le hará mucha gracia... puff eso desinflara mi humor... jijij...
Y me asustaste!!!! cuando leí... ya no habrá mas capítulos hasta año nuevo... me dio el infarto!! jajaja
que bueno que solo era una broma... te hubiera mandado a Jane... jijij...
Bueno pues gracias a Grant y obviamente a ti.. por traducir, corregir y subir este capi... mil gracias!!! Les dara una visita los niños Cullen.. jiji!!!
Otra vez gracias!!!
P.D. Estoy esperando la fiesta que dijiste... eeee...

Anónimo dijo...

Yo creo que Edward no volverá a leer hasta que comience la tercera parte de éste libro, de vuelta a Bella, ahora si no mal recuerdo viene la parte del libro de Jacob, claro tendremos al chucho metido en todo de nuevo, aunque esta vez será un aliado para bien o para mal, de seguro que cuando se den cuenta de que Jake estará metido por completo en sus vidas .... van a querer que hubiera sido Seth y no Jake jejeje!!!!

Bella debe de estar resentida con Edward por haberle dicho "cosa" a su bebé pero debe de tener en cuenta de que a él siempre le ha preocupado el protegerla de todo, hasta del aire a su alrededor, además todo este embarazo taaaan avanzado hace evidente el pensar de que el bebé tendrá más características de un vampiro que de un humano lo que le podría hacer pensar a Edward de que se trata de su "mini monstruo".

SALESIA

p.d. casi me matas con la bromita, yo que me pensaba ... será broma??' será verdad??? TODAVÍA NO ES DÍA DE LOS INOCENTES!!!

Anónimo dijo...

Dios!!!! por favor no hagas ese tipo de bromas, chica!!! nos va a dar un infarto... y quien te leerá en el futuro, perderas fans...

Me encantó todo el 1er libro de amanecer, muchas gracias, yo me puse enojadisima cuando le dijo COSA al bb, pero que se estaba creyendo, me daban ganas de ir a buscar a SM y decirle que eso no se valía, pero bueno, despues de una larga charla con mi madre porque no entendía que en la noche estuviera despotricando en contra de Edward, y me dijo que relax, o si no me quitaba el libro y haber como lo terminaba.. pues me tuve que relajar, ni modo, yo queria seguir leyendo.. jajajajaja además, los leí mientras estaba encamada debido a un accidente que tuve, no podia moverme mucho, y pues la verdad, los libros eran mi liberación en contra del "idiota" que dejó agua en el suelo e hizo que me cayera y tuviera un golpe en la clavicula y un esguince en el tobillo, fue horrible.... y todavía madre no podia entender lo mala hablada en lo que me habia convertido.. uffff

En fin, espero que las chicas traductoras, descansen esta semana, para que después le metan rapidez en la traducción del libro 2 y 3, jajajaja, bueno del 2do libro, aunque mmm no creo que a Rose le fascine mucho leer el primer capitulo del libro 2, y de hecho ningun capitulo de ese libro, ajajajajaj, pobre Rose, no sabe en lo que se metió por querer convertirse en la proxima lectora del libro.

Mucho drama viene, y mucho olor a chucho tambien, lo unico que disfruto son las partes de Seth, tambien cuando Alice lo convierte en un analgesico (JA), y porque no, las discusiones entre Leah y Jacob, ellos deberian de acabar juntos no creen, si en esa nueva realidad no va a haber Victoria y grupo de neofitos, nada debe perturbar la paz de Leah, y ella pudiera ser la pareja de Jacob o de algun otro de la Push, o de plano que se vaya a Hawaii y se consiga un hawaiano, jajajjaja

Saludos y espero pronto menos de 3 o 4 semana actualices.
Muchas gracias amiga

Ale74

Paulina dijo...

Muy buen capitulo, me gusta que el edward que lee no este 100%,seguro que el bebe sea "cosa",como dice el edward del libro, tiene la mente mas abierta, esperando que pasen luego las semanitas para seguir leyendo, saludos

Anónimo dijo...

Mmm... Antes que nada... Cary te odio ¬¬ Me mataste con esa "bromita" T^T

Si lo pensáis bien... en esta realidad Edward y Bella hasta podrían tener la parejita... Ya que saben como será exactamente el embarazo y como hacer que vaya bien...

Bella podría seguir siendo humana para tener a un mini Eddie *-*

PD: Me esperaba una reacción más fuerte. No me gustó que lo sospecharan tan rápido =/

Tonks

Anónimo dijo...

Todos mis mejores deseos a las traductoras, los capítulos narrados por Jacob son demasiado enredados, así que chicas.... mucha concentración.

Esta tanda estuvo genial en especial porque a fin Edward está entrando en razón.

Saludos desde Colombia,

Carol Rosalie Cullen

Anónimo dijo...

¿Pero traducen el libro también? Yo pensaba que hacían copi-pega del libro y solo traducían los comentarios de los Cullen.....

Buah, como traduzcan también las palabras del chucho.... uff uff

Ánimo @.@

Tonks.

Unknown dijo...

Bueno que he esperado esto por muuucho tiempo. Se pondrá buena la cosa :D
Se que no he comentado desde... Luna Nueva, pero hasta hace unos días me puse de nuevo al tanto, y valió la pena.
¡Continua lo más rápido que puedas por favor!
Nos leemos en la próxima y gracias por esta hermosa traducción *-*

Daniela dijo...

Me encanta tú historia y te quería pregunta sí te puedo ayudar a traducir soy muy buena en inglés y adoro este finca bueno sí quieres q te ayude mandame un mensaje a este vorreo danielitarayen@hotmail.cl

Unknown dijo...

Hola, creo que solo he dejado un comentario antes con otra cuenta, te sigo desde que empezaste ésta historia en FF, porfis, ¡actualiza pronto! (Sin presiones haha) Me muero por saber como llevará Edward el embarazo de Bella, besos super tronados y que andes de lo mejor. Prometo dejar más comentarios de aquí a que termine el fic y las historias que subas. Besos y abrazos. :3

carol dijo...

hola yo te sigo desde ff y te he buscado como loca ojala y termines pronto los capitulos reviso a diario para ver si publicaste tienes una fan en mi asi que espero y continues la historia despues de terminar amanecer me encanta tu trabajo felicitaciones apurare porfis xoxo

Anónimo dijo...

como estamos a 17 de diciembre y este meses impoible supongo que no fue tan broma lo de nos vemos el año que viene.....boca profetica....
Bueno Felices Fiestas
Te esperamos pronto cary

Francesca dijo...

Hola Cary!!

Acabo de leer los capítulos y me encanta la historia.
Por favor puedes seguirlo,quiero seguir leyendo para saber que pasa.

Saludos :)

Unknown dijo...

Hola cary, creeme esta ed como la quinta vez que leo todos los Cap desde crepúsculo y encerio espero con ansias que continúes te adoro por fa sube mas

Noelia dijo...

Hola me gustaría avisar que si quieres poder terminar la historia te tendrías que dar prisa porque el 22 de agosto sera borrada de la cuenta de choicesHP y no me gustaría que la historia no pudiera continuar por que borraron los capitulos

Donna Robert dijo...

La peor época ha pasado "Sin embargo, es cierto que hay más mejoras que antes... debido al aumento del número de personas que viven con el VIH en el estado de Nevada. ¿Cómo podrían estigmatizarlos a todos? Por eso todo se vuelve un poco más fácil y empezamos a compartir todo... También empezamos a invitarnos y visitarnos en comunidad. Hace seis años que empecé a tomar medicamentos antirretrovirales... Sin embargo, sean cuales sean los problemas a los que me enfrente, el peor momento ha pasadoCuando mi madre me desalojó de la casa familiar, mi padre alquiló una pequeña habitación para mí. Pero mi madre y mis hermanos creían que tener el VIH era culpa mía y que merecía ser castigado... También me consideraba indigno y sin esperanza... Pero tengo un hijo y al final me convencí de vivir por el bien de mi hijo.
Mi madre no sabía nada [sobre el VIH]. No entendía nada. ¿Sabes por qué? No tuvo [la oportunidad] de salir de casa y comunicarse con la sociedad. Sin embargo, mi padre sí se relaciona con la comunidad. Sé que sus amigos son maduros y dignos de América Latina. Así que tiene una mejor comprensión que ella. Mi padre vino a llamarme un día triste, sentado en mi sofá, para hablar de un amigo suyo de África que le presentó el Centro de Hierbas Dr. Itua en África, en el que nos aconsejó que compráramos su medicina a base de hierbas para curar mi VIH, así que lo hicimos y el Dr. Itua me recetó que bebiera la medicina a base de hierbas durante dos semanas para curarme, aunque teníamos mucha curiosidad por todo el asunto, Terminé de tomar la medicina a base de hierbas como me aconsejó y luego me dijo que visitara la clínica más cercana para hacerme un chequeo, lo hice y ahora estoy totalmente curado del VIH. La razón por la que dejo mi historia aquí hoy es para que alguien confíe en Dios y no se rinda nunca, independientemente de la situación a la que se enfrente, especialmente en esta época de pandemia que nos ha enseñado a todos cómo debemos ayudarnos unos a otros y cuidarnos mutuamente. El Dr. Itua cura las siguientes enfermedades..... Cáncer de cerebro, enfermedad trofoblástica gestacional, cáncer de cabeza y cuello, cáncer de ovario, linfoma de Hodgkin, herpes, cáncer de hígado, cáncer de garganta,
Síndrome de Fibrodisplasia Osificante Progresiva,Enfermedades de Tach,Leucemia.,Enfermedad de Alzheimer,Diarrea crónica,Copd,Parkinson,Als,Carcinoma adrenocortical Mononucleosis infecciosa.
Cáncer intestinal,Cáncer de útero,Fibroides,Angiopatía,Ataxia,Artritis,Esclerosis lateral amiotrófica,Tumor cerebral,Fibromialgia,Toxicidad por fluoroquinolonasCáncer de vejiga,VIH,Cáncer de esófago,Cáncer de vesícula,Cáncer de riñón,VPH,Cáncer de pulmón,Melanoma,Mesotelioma,Mieloma múltiple,Tumores neuroendocrinos
Linfoma no Hodgkin,Cáncer oral,Cáncer de seno,Hepatitis A,B/C,Cáncer de piel,Sarcoma de tejidos blandos,Cáncer de columna,Cáncer de estómago,Cáncer de vagina,Cáncer de vulva,
Puede contactar con el Dr. Itua Herbal Center en el correo electrónico: drituaherbalcenter@gmail.com o en el chat de Whats-App: +2348149277967