jueves, 30 de abril de 2015

¿Qué por qué no me largué? Ah, si, vale, por que soy imbécil.

Aviso: Los libros aquí transcriptos y los personajes pertenecen a Stephenie Meyer y la historia original “Reading Breaking Dawn” a Choices HP, yo solo la traduzco, todo esto es sin ánimos de lucro, solo por mero entretenimiento.
Traducción: R.R.GRANT
Corrección: Cary0605

¿Qué por qué no me largué? Ah, si, vale, por que soy imbécil.”Leyó Esme.

“Él realmente tiene unos muy interesantes nombre para sus capítulos” Emmett rió entre dientes.

Me sentí... Bueno, no sé cómo me sentí. Aquello no parecía real. Tenía pinta de ser la versión gótica de un culebrón de comedia de los malos, pero en vez de ser el empollón marginado del instituto a punto de pedirle a la jefa de las animadoras que sea su pareja en el baile de graduación, yo era el tipo que había quedado segundo, el hombre lobo a punto de pedirle a la esposa del vampiro que nos arrejuntásemos para procrear. Guay.

“Creo que podría ver esa comedia” Emmett rió nuevamente.

No, no iba a hacerlo. Era una metedura de pata y un comportamiento de lo más retorcido. Iba a olvidarme de todas las tonterías de Edward.

Pero sí iba a hablar con ella e intentaría que me hiciera caso.

“Buena suerte con eso” Dijo Emmett riendo.

Y ella pasaría de mí, como de costumbre.

Edward no efectuó comentario alguno ni replicó a mis pensamientos mientras marchaba el primero de vuelta al edificio. ¿Por qué había elegido un lugar tan lejano para la conversación? ¿Había buscado un sitio lo bastante apartado de la casa como para que su familia no pudiera escuchar los susurros?

“Obviamente” Dijo Alice rodando los ojos. “¿Acaso crees que él quiere que alguno de nosotros oiga eso?

Era probable, a juzgar por las miradas llenas de recelo y confusión que nos lanzaron los Cullen en cuanto traspasamos el umbral. Ninguno parecía disgustado o enojado, lo cual me llevó a concluir que ninguno de ellos había oído nada del favor solicitado por Edward.

Vacilé en el quicio de la puerta sin saber qué hacer. Allí se estaba mejor, pues todavía llegaba del exterior algún ocasional soplo de aire respirable.

Edward se encaminó hacia el corrillo de vampiros con gesto envarado. Bella le dirigió una mirada ansiosa antes de mirarme a mí, y luego de nuevo a él.

La tez de sus mejillas adquirió un tono ceniciento. Entonces comprendí a qué se refería su marido cuando aseguraba que empeoraba en situaciones de estrés.

"Entonces lárgate de ahí, chucho" Rosalie siseó. Odiaba el tener que desear que el chucho se quedara allí porque esa era la única manera que podía saber lo que le estaba sucediendo a Bella.

—Vamos a dejar que Jacob y Bella hablen en privado —anunció Edward con una voz completamente inexpresiva, como la de un robot.

“Honestamente…¿Tú crees que voy a permitir eso?” Siseó Rosalie.

“Sí” Respondió Edward.

——Por encima de mi cadáver —replicó Rosalie con un siseo y sin apartarse del lado de Bella.

Mantuvo una mano reposando sobre la mejilla chupada de la enferma con gesto posesivo. Edward ni la miró.

—Bella —prosiguió con el mismo tono monocorde—. Jacob desea hablar contigo. ¿Tienes miedo de quedarte a solas con él?

La interpelada me miró con desconcierto y luego contempló a Rosalie.

—Está bien, Rose. Jake no va a hacernos daño. Ve con Edward.

—Quizá sea una trampa —le previno la rubia.

“Oh, tú piensas…”Comenzó Emmett.

“Por favor, no digas nada más.” Dijo Esme con tristeza.

—No veo cómo —contestó Bella.

—No vas a perdernos de vista ni a Carlisle ni a mí, Rosalie —intervino Edward. El timbre desapasionado de su voz se desvaneció en parte y dejó entrever una nota de ira—. Es a nosotros a quienes teme Bella.

—No —replicó la aludida en voz baja. Tenía los ojos relucientes y las mejillas llenas de lágrimas—. No, Edward, yo no...

“Edward” suspiro Alice, su hermano solo se encogió de hombros también resignado.

Él sacudió la cabeza y esbozó una leve sonrisa, pero daba grima mirarla.

—No pretendía expresarlo de ese modo, Bella. Estoy bien, no te preocupes por mí.

Deprimente. Él tenía razón. Bella se estaba castigando a sí misma por herir los sentimientos de su esposo.

“Si, bueno, así es Bella.” Dijo Emmett.

La chica era la típica mártir,..

“Deberías decir eso de nuevo” Dijo Emmett.

pero había nacido en el siglo equivocado.

Edward sonrió ante eso… pensando en la visión que Bella tuvo en el libro pasado.

Debía haber vivido hace un porrón de años, cuando podía haberse ofrecido como comida para los leones por una buena causa.

—Salgamos todos —instó Edward, señalando la puerta con un gesto envarado de la mano—. Por favor.

Intentaba mantener la compostura como deferencia hacia Bella, pero estaba a punto de perderla. Me di cuenta de lo cerca que estaba de ser otra vez el tipo consumido por el dolor que había visto fuera de la casa, y los demás también.

Esme se estremeció ante eso y todo el mundo miró con tristeza a Edward.

"Ella estará bien, los dos estarán bien ", dijo Rosalie. Ella sabía que, incluso en su obsesión para proteger al bebé, que ella no le gustaría ver a su hermano así.

De modo que se dirigieron a la puerta en silencio; y en un pispas, porque en dos latidos de corazón sólo quedaron en la habitación Rosalie, dubitativa en el centro de la sala, y Edward, expectante junto a la entrada.

—Quiero que salgas, Rose —aseguró Bella con un hilo de voz.

La rubia fulminó a su hermano con la mirada y le indicó con el dedo que abandonara la habitación el primero de todos.

"Por supuesto que no significa que no seguirás siendo tan vigilante como siempre", dijo Edward, tratando de broma.

"Naturalmente", Rosalie le sonrió.

Él cruzó la puerta y la Barbie le imitó, no sin antes haberme dedicado una mirada de advertencia.

Rosalie siseó ante eso.

“Esa es la forma en que ellos son..”, Dijo Esme luciendo también un poco disgustada por el comentario.

Una vez a solas, crucé la estancia y me senté en el suelo junto a Bella. Le tomé sus heladas manos con las mías y se las froté con cuidado.

——Gracias, Jacob, qué gusto...

—No voy a mentirte, Bells, tienes un aspecto horroroso.

—Lo sé —repuso con un suspiro—. Debo de dar miedo.

—Más que la cosa del pantano —convine. Ella se echó a reír.

—Cuánto me alegra tenerte aquí. Sonreír me sienta bien. No sé si sería capaz de soportar otro drama.

“Luce como si estuvieras perdiendo tus dotes, Em.” Dijo Jasper. “Se supone que tu eres nuestro alivio cómico.”

“Lo siento.” Dijo Emmett luciendo preocupado  sobre como las cosas malas estaban afectando al Emmett del libro, causando que no tratara de romper la tensión.

Puse los ojos en blanco.

—Vale, vale —admitió ella—. Soy yo la que lo lleva siempre encima.

—Sí, eso es. ¿En qué estabas pensando, Bells? ¡De verdad...!

—¿Te ha pedido él que me eches un sermón?

—Algo así, pero no logro comprender por qué se cree que vas a hacerme caso. Nunca antes lo has hecho.

Suspiró.

—Te lo dije... —empecé a decirle.

—¿Sabías que el «te lo dije» tiene un hermano, Jacob? —me preguntó, interrumpiéndome—. Se llama «cierra ese maldito pico».

Emmett se rió de eso. “Buena esa, Bella.”

—Ésa es buena.

La piel se le estiró hasta dejarle marcados los huesos de la cara cuando me dedicó una ancha sonrisa.

"¿De verdad necesita darse cuenta de eso?" Rosalie gruñó, mirando a Edward, quien reaccionó mal cuando se mencionó eso.

—No puedo quedarme con el crédito... Lo he sacado de un capítulo que volvieron a echar de Los Simpson.

“Yo recuerdo ese episodio… es de la decimoséptima temporada, donde...” Comenzó Emmett.

“No nos importa” Dijo Rosalie.

“Lo recordamos también.” Añadió Jasper.

—Me lo perdí.

—Era divertido.

Permanecimos en silencio durante un minuto. Mis manos calientes le entibiaron las suyas un poco.

—¿De veras te ha pedido que me des la charla?

Asentí.

—Desea que te meta sentido común en la sesera. Es una batalla perdida antes de empezar.

Emmett se carcajeó y Rosalie rodó los ojos.

—Y en tal caso, ¿por qué aceptaste? No le contesté, pues no estaba seguro de saber hacerlo.

Sólo sabía que cada segundo transcurrido en compañía de Bella únicamente iba a servir para aumentar el dolor que experimentaría más tarde. Me estaba llegando el día de echar las cuentas, como un yonqui con un alijo de drogas limitado. Cuanto más me llevara ahora, más duro iba a resultar cuando se acabara.

“¿Y como podría él saber eso?” Preguntó Esme con tono agudo.

“Estoy seguro de que solo es un punto de referencia.” Dijo Carlisle.

—Va a salir bien, ya verás —me aseguró al cabo de un minuto—. Estoy segura.

“Wow, ella suena como tú.” Dijo Emmett mirando a Rosalie.

“Siempre supe que ella era inteligente” Dijo Rosalie.

Eso me hizo enrojecer de rabia otra vez.

—¿La demencia es uno de los síntomas de tu enfermedad? —le espeté.

Ella se carcajeó, a pesar de que mi enfado era tan grande que empezaron a temblarme las manos, entrelazadas con las suyas.

—Es posible —repuso—. No digo que las cosas vayan a ser fáciles, Jake, pero, llegados a este punto ¿cómo podría no creer en la magia cuando he sobrevivido a todo lo que me ha pasado?

"¿Magia?" varias personas preguntaron.

"Un milagro", Carlisle ofreció, "algo que está más allá de la creencia, pero que todavía es posible."

"Básicamente, ella está diciendo lo que dijiste, Carlisle," Alice lo señalo a su oadre, "cuando estabas convenciendo a Edward para seguir leyendo."

"Sí, me di cuenta." Carlisle sonrió. "Realmente creo que me va a gustar llegar a conocerla."

—¿Magia?

—Especialmente en lo que a ti respecta —dijo con una sonrisa. Retiró una de las manos de entre las mías y me acaricio la mejilla. Estaba más caliente que antes, pero me resultó fría al tacto, como todas las demás cosas—. Terminarás encontrando la magia y eso te permitirá poner orden en tu vida, puesto que nadie lo merece más que tú.

—¿Qué incoherencias estás diciendo?

"Su impronta, obviamente," Emmett puso los ojos en blanco.

"No todos los lobos se impriman.” Edward espetó.

"Pensé que te gustaría que él se imprimara en alguien mas.” Emmett lo miró inquisitivamente.

"Sí.” dijo Edward. Su voz fue tranquila, pero Jasper lo miraba con recelo, no estando seguro de lo que su hermano sentía.

Bella contestó sin perder la sonrisa

—Edward me dijo una vez que la imprimación era como El sueño de una noche de verano, como la magia. Hallarás lo que buscas de veras, Jacob, quizás entonces todo esto tenga sentido.

Edward cerró los ojos, no le gusta como sonaba eso.

Me habría puesto a pegar voces si ella no hubiera ofrecido un aspecto tan frágil.

Pero como lo tenía, me limité a soltarle un gruñido.

—Si te piensas que la imprimación va a darle sentido a este despropósito... —Hice un esfuerzo en busca de las palabras adecuadas—. ¿De veras crees que esto va a estar bien sólo porque algún día yo pueda imprimarme de una desconocida? —Le señalé su cuerpo hinchado con el dedo—. ¡Dime qué lógica puede tener que yo te ame! ¡O que tú le ames a él! Cuando te hayas muerto, Bella, ¿cómo van a volver a estar las cosas bien? ¿Qué propósito tiene tanto dolor? ¡El tuyo, el mío, el de Edward! No es que tu marido me preocupe, pero también vas a matarle a él. —Ella dio un respingo, pero no me detuve—. Por tanto, al final, ¿qué significado tiene que retuerzas al máximo esta historia de amor? Si tiene alguna lógica, por favor, Bella, muéstramela ahora mismo, porque yo no se la veo.

"Él tiene razón en eso," dijo Emmett.

"No, no la tiene." Rosalie le espetó. "El punto de todo esto fue estar enamorada, tener este bebé, y vivir felices para siempre."

"Pero si ella muere ..." comenzó Emmett.

"Ella no va a morir" Dijo Rosalie con firmeza.

"Está bien, pero yo todavía no veo cómo la cosa impronta haría bien para él en la final", dijo Emmett con terquedad.

"Como si me importara eso.” Rosalie puso los ojos; sin embargo, luego la golpeó como una tonelada de ladrillos, algo que haría que le dieran ganas de preocuparse por esta estupidez. Ella retrocedió ante ese pensamiento, pero no pudo evitar mirar a Edward, quien estaba pellizcando su nariz y luciendo igual que como ella se sentía... pero no era como si su pensamiento fuera nuevo para él. Eso la hizo sentir peor acerca de esto.

Ella exhaló.

——Todavía no lo sé, Jake, pero presiento que todo va a acabar bien, aunque resulta difícil de aceptar viendo cómo pinta la cosa ahora. Supongo que podrías llamarlo fe.

Carlisle sonrió ante eso.

—Vas a morir para nada, Bella. ¡Para nada!

Dejó caer la mano de mi rostro y la posó sobre el vientre hinchado con gesto de cariño. No tuvo que despegar los labios para que yo supiera lo que se le pasaba por la cabeza. Iba a sacrificarse por eso.

"No... ella está pasando esta lucha por el bebé", Rosalie gruñó, incluso más enojada con el chucho ahora con ese nuevo pensamiento en la cabeza. "¡Ella no se está muriendo!"

—No voy a morir —respondió entre dientes. Pude apreciar que repetía frases que ya debía haber dicho con anterioridad—. Conseguiré que mi corazón siga latiendo. Tengo fuerza suficiente para lograrlo.

"Ah, eso tiene sentido", dijo Carlisle. "Ella va a convertirse en un vampiro después del parto... Me pregunto cómo el bebé va a nacer, aunque ..."

Edward miró a Carlisle, como reflexionó sobre las formas en que el nacimiento podría ser, pero Esme pensó que lo mejor era simplemente seguir leyendo.

—Todo eso son chorradas, Bella. Has intentado alargar lo sobrenatural más de la cuenta. Ninguna persona normal lo haría. No tienes suficiente vitalidad. — Tomé su rostro con las manos. No necesité de recordatorio alguno para actuar con suavidad. Todo en ella me recordaba su fragilidad.

"Sí, ella es frágil ... su cuerpo, por lo menos, pero Bella es fuerte en otras formas" Dijo Jasper. "Si alguien puede hacerlo, es Bella."

—Puedo hacerlo, puedo hacerlo —murmuró.

—Pues no me da esa impresión, la verdad, así que suelta: ¿cuál es tu plan? Y espero que tengas alguno.

Ella asintió, pero me rehuyó la mirada.

 —¿Sabías que Esme se tiró por un despeñadero? Cuando era humana, quiero decir...

"Hey… no debería estar diciendo secretos de la familia como ese." dijo Emmett.

"Esta bien" Dijo Esme.

—¿Y...?

"Idiota", dijo Rosalie, junto con Alice y Emmett este momento.

—Estuvo tan cerca de la muerte que ni siquiera se molestaron en llevarla a la sala de urgencias, la dejaron cerca de la morgue, pero su corazón todavía latía cuando Carlisle la encontró...

Ajá, a eso se refería antes con lo de no permitir que el corazón dejara de latir.

—No tienes intención de sobrevivir a esto como humana —concluí lentamente.

—No, no soy idiota. —Entonces me buscó con la mirada—. Sin embargo, supongo que tú tienes tu propia opinión a este respecto.

“Apuesto a que sí la tiene.” Emmett se rió entre dientes.

—Una vampirización de emergencia —murmuré.

“Me gusta eso.” Emmett se carcajeó. “Supongo que todos nosotros tuvimos una vampirización de emergencia.

“No, solo los que Carlisle creó.” Le corrigió Jasper, que inmediatamente recibió un apretón de manos por parte de Alice.

—Funcionó con Esme, y con Emmett, y con Rosalie, incluso con Edward. Todos ellos estaban en las últimas. Carlisle los transformó únicamente porque era o eso o la muerte. Él no puso fin a sus vidas, las salvó.

"Puedes apostar tu culo que lo hizo", dijo Emmett.

"Y no sólo con la vampirización de emergencia", se rió Alice.

Noté una súbita punzada de culpabilidad en lo tocante al buen vampiro del doctor, tal y como había ocurrido antes. Desterré la idea enseguida y comencé otra vez con las súplicas.

—Hazme caso, Bella, por favor, no hagas eso. —Tuve una noción clara de cuánto me importaba que ella siguiera con vida, al igual que había ocurrido antes, cuando se comentó en la manada el telefonazo de Charlie. Comprendí que necesitaba mantenerla viva de algún modo, de cualquier modo.

"¿Y es por eso que has venido a atacar al comienzo del último capítulo?" Alice rodó los ojos.

"Parece ser que tiene un conflicto acerca de esto como Edward." Jasper se rió entre dientes.

Respiré hondo—. No esperes hasta que sea demasiado tarde, Bella. No vayas por ese camino. Vive, ¿vale? Tú limítate a seguir con vida. No me hagas esto. No se lo hagas a Edward —mi voz se hizo más audible y ganó en dureza—. Sabes qué va a hacer cuando tú mueras, ya lo has visto antes. ¿Deseas provocar que regrese con los asesinos italianos?

 "No lo voy a necesitar", dijo Edward.

"¡Edward!" Esme y Alice le sisearon.

"No quise decir que yo iba a hacer eso" Dijo Edward.

Ella se encogió en el sofá. No hice mención alguna a que eso no iba a ser necesario esta vez. Hice un esfuerzo por suavizar la voz antes de preguntar:

—¿Recuerdas tus palabras cuando me hirieron los neófitos? —aguardé, pero ella no me contestó; cerró los labios con fuerza—. Me dijiste que fuera bueno e hiciera caso a Carlisle —le recordé—. ¿Y qué hice yo? Obedecer al vampiro. Por ti.

"¿Es que la única razón por la que me escuchó?" Carlisle suspiró.

—Lo hiciste porque ésa era la decisión correcta.

—De acuerdo, pero lo hice, dejo a tu gusto el motivo.

Ella respiró hondo.

—Ahora no está en juego lo mismo. —Su mirada recayó sobre su enorme vientre redondeado y susurró por lo bajo—: No voy a matarle.

"Ah…miren, es un niño." Emmett vitoreó. Rosalie y Edward lucieron esperanzados.

"No lo sabemos todavía.” Jasper sonrió hacia él, pero se dio cuenta del cambio que sucedió en Edward y Rosalie, sus sentimientos iban a juego de manera excelente. "Podría ser simplemente la ilusión."

Volvieron a temblarme las manos.

—Ah, no había oído la buena nueva. De modo que vas a alumbrar un precioso niño, ¿no es eso? Tal vez debería haber traído unos globitos azules.

Las facciones de Bella adquirieron una tonalidad rosácea…

"Oh... así que ella no lo sabe entonces." Emmett suspiró. "Ey, Eddy, ¿quieres un niño o una niña?"

"Niño.” Edward respondió de inmediato, pero si era honesto consigo mismo, una gran parte de él quería una niña... que fuera exactamente igual que Bella.

"Oh.” Emmett sonrió con maldad hacia él, "supongo que no quieres tener que matar a todos los chicos que se enamorarían de ella entonces."

"Sí" Coincidió Edward, sabiendo que probablemente le gustaría la forma en que se sentiría si a alguien le gustase a su niña... es decir, si alguna vez tenía una.

 tan hermosa que me provocó un retortijón en el estómago, como si alguien me hurgara en las tripas con un mugriento y oxidado cuchillo de filo dentado.

Rosalie sonrió ante esto y Esme frunció el ceño.

—No sé si es un chico —admitió, algo avergonzada—, ya que los ultrasonidos no son operativos. La membrana alrededor del bebé es demasiado dura, como la piel de los vampiros, por lo que sigue siendo un pequeño misterio, pero en mi mente siempre he visto un chico.

—Ahí dentro no llevas un precioso bebé, Bella.

"Ahí es donde no estoy de acuerdo contigo," dijo Alice. "Creo que lo que está allí, sería hermoso."

"Er ... ¿qué?" Preguntó Edward.

"Bueno, incluso si se trata de algún tipo de monstruo como él teme, yo creo que con un vampiro como un padre, el bebé sería bonito al menos" Explicó Alice.

"Genial" murmuró Edward. Eso realmente no era algo que él quería oír.

—Ya veremos —refutó ella, un tanto pagada de sí misma.

—Tú no —le espeté.

—Eres francamente pesimista, Jacob…

Todo el mundo resopló ante eso.

"Ella no es la mejor persona para hablar de pesimismo" Se rió Alice.

Existe una oportunidad de que escape bien de todo esto, no hay duda.

No conseguí articular la respuesta. Bajé la mirada y exhalé hondo y despacio en un intento de mantener controlada mi rabia.

—Va a salir bien, Jake —me dijo mientras me palmeaba el pelo y me acariciaba la mejilla—. Shh. Todo va bien.


No levanté la vista. —No, no va nada bien. Ella enjugó una lágrima de mi mejilla. —Calla.

—¿Y qué hay de tu deseo, Bella? —contemplé fijamente la alfombra nivea sobre la cual mis embarrados pies descalzos habían dejado manchas.

"Argh" Alice gimió y Esme frunció el ceño.

Genial.

"Eso es simplemente grosero.” Esme resopló.

—. Pensé que querías ser vampiro por encima de cualquier otra cosa en este mundo, y ¿justo ahora vas a renunciar? No tiene ni pies ni cabeza. ¿Desde cuándo te ha entrado esa fiebre por ser madre? ¿Por qué te has casado con un vampiro si deseabas con tanto anhelo la maternidad?

Estaba peligrosamente cerca de ofrecerle lo que Edward me había pedido. Veía cómo las palabras me conducían por ese camino de forma inevitable; no era capaz de cambiar de dirección.

"Porque eres mucho mas idiota de lo que Edward es." dijo Alice. "Tratar de salvarla de cosas todo el tiempo..."

"De cosas que no van realmente a hacerle daño" Agregó Rosalie.

Ella suspiró.

—No es así como funcionan las cosas. En realidad, no me preocupaba tener un hijo y ni me lo había planteado. La cuestión no es tener un bebé, es... bueno, es este bebé.

Rosalie, Esme y Alice sonrieron ante eso.

"Pero ¿no pensó ella en tener hijos de Jacob?" Emmett señaló. "¿No es por eso Eddy estuvo todo congelado en el último libro?"

"Sólo tenías que arruinar el momento, ¿no?" Rosalie le gruñó.

"Lo siento"  Dijo Emmett inmediatamente.

—Es un asesino, Bella, mírate al espejo.

—No lo es. Se trata de mí, que soy humana y débil, pero seré capaz de sacar esto adelante, Jake, voy a poder.

—Venga, vamos, Bella. Cállate. Puedes contarle todas esas milongas a tu chupasangres, pero a mí no me la das. No vas a lograrlo.

Me lanzó una mirada intensa.

—Eso no lo sé, y claro que me preocupa.

Edward se estremeció ante eso. Se inclinaba más hacia la miseria ahora.

—Te preocupa —repetí entre dientes.

Bella jadeó y se aferró la barriga. Mi furia cesó con la misma inmediatez que la luz en cuanto pulsas un interruptor.

—Me encuentro perfectamente —jadeó—. No es nada.

Sin embargo, no le presté atención. El movimiento de sus manos había retirado la sudadera, dándome ocasión de verle la piel. Unos enormes lamparones de color púrpura oscuro le salpicaban el vientre como si fueran manchas de tinta.

Y ahora, la miseria se hizo cargo y Edward se congeló de nuevo

Se reajustó la prenda en cuanto se percató de mi semblante de espanto.

—Él es fuerte, nada más —repuso ella a la defensiva. Esas manchas cárdenas eran hematomas.

Contuve un ataque de náuseas y comprendí a qué se refería Edward cuando hablaba de ver cómo el feto le hacía daño. De repente, yo mismo me sentí un tanto majareta.

“¿Qué quieres decir con ‘De repente’? Emmett se carcajeó.

—Bella —empecé; ella notó un cambio de tono en mi voz y alzó los ojos, turbios por la confusión; todavía respiraba con pesadez—, Bella, no lo hagas.

—Jake...

—Escúchame y no te levantes otra vez, ¿vale? Tú sólo escucha, ¿y qué pasaría si...?

—¿Que qué pasaría si...?

—¿Y si no fuera un acontecimiento irrepetible? ¿Y si no fuera una jugada a todo o nada?..

"Sabía que iba por lo menos a tratar esto.” se rió Emmett. "Esto debe ser bueno."

..¿Qué pasaría si hicieras caso a Carlisle como una buena chica y siguieras viva?

—No voy a...

—Aún no he terminado. Si lo hicieras, podrías seguir con vida e intentarlo de nuevo. Este embarazo no va a salir bien. Haz otra intentona.

"Ella ya está unida al bebé.” dijo Rosalie. "Una solución como esa nunca podría funcionar."

"Nunca sería tan fácil," dijo Esme. “No lo entienden, pero perder a un hijo en cualquier momento..." Se le fue apagando la voz y se apoyó en Carlisle.
Después de un momento, Esme continuo leyendo.

Frunció el ceño y se llevó una mano al punto de entrecejo donde se unía el trazo de las cejas. Se acarició la frente durante unos instantes mientras intentaba buscarle un sentido a mis palabras.

—No entiendo a qué te refieres con lo de hacer otra intentona. ¿Acaso piensas que Edward va a dejarme...? ¿Y qué diferencia puede haber? Estoy segura de que cualquier bebé...

Emmett se rió entre dientes y otras personas rodaron sus ojos. "Eso no es exactamente lo que él quería decir."

—Sí, las cosas no van a cambiar si él es el padre...

Eso aumentó la confusión escrita en su semblante extenuado.

—¿Qué...?

Pero ya no fui más lejos. No tenía sentido. Jamás iba a ser capaz de salvarla de sí misma. No iba a conseguirlo en la vida.

Entonces, Bella pestañeó y pude ver que ya se había percatado de por dónde iba yo.

—Oh, uf, ¡Jacob, por favor! ¿Crees que voy a ser capaz de matar a mi bebé y reemplazarlo con cualquier otro sustituto, engendrado por inseminación artificial? — Ahora estaba enfadada.

Emmett se estaba riendo a carcajadas.

“Eso tampoco es lo que él quería decir.” Dijo Jasper riendo también.

“Ella está en el punto donde ni siquiera se le cruza por la cabeza tener otros hijos con ese chucho” se río Alice.

—. ¿Por qué iba a querer el niño de un desconocido? ¿Acaso no hay diferencia o es que vale cualquier bebé?

"Bueno, así es como funciona si adoptas un niño." dijo Esme, "pero hay que querer hacer eso."

"Pero Bella sólo quiere tener un hijo de Edward.” dijo Alice. "Así que eso no funcionaría realmente para ella."

—No me refería a eso —musité—. No a un desconocido. Se inclinó hacia delante.

—En tal caso, ¿a qué te referías?

 —Nada, no he dicho nada, como de costumbre.

—¿De dónde ha salido semejante idea?

——Olvídalo, Bella.

Ella frunció el ceño, recelosa.

—No te habrá dicho él que digas eso, ¿verdad?

Vacilé unos segundos, sorprendido porque lo hubiera cazado al vuelo.

“Yo no estoy sorprendido, ella siempre logra adivinar los motivos de Edward rápidamente.” Dijo Jasper riendo entre dientes.

—No.

—Es cosa de Edward, ¿a que sí?

—No, de veras, él no dijo nada sobre una inseminación artificial...

"¿Por qué te está protegiendo?" Preguntó Emmett.

"¿Quién sabe?.” Alice se encogió de hombros.

"Probablemente tiene algo que ver con él, no queriendo parecer que iba a hacer todo lo que Edward le pidió que hiciera." Jasper se rió entre dientes.

Las facciones del semblante de Bella se suavizaron; entonces, se reclinó sobre los cojines y se hundió en ellos.

—Él haría cualquier cosa por mí, y yo se lo estoy haciendo pasar fatal. —Tenía el rostro ladeado y la mirada perdida en la pared. No me hablaba a mí. En absoluto—. Pero ¿en qué estaba pensando? Que cambie esto —continuó mientras recorría su vientre con los dedos— por el bebé de un desconocido...

 “Estas llegando Bella, un poco más” se carcajeo Emmett.

La última parte la dijo en un murmullo casi inaudible antes de que le fallara la voz. Los ojos se le llenaron de lágrimas.

—No tienes por qué herirle —murmuré. Cualquier palabra en defensa de Edward me quemaba en los labios como si fuera ácido, pero yo era muy consciente de que se trataba de una de mis mejores bazas para mantenerla con vida.

“Sí, eso es probablemente cierto.” Alice estuvo de acuerdo.

Aun así, las apuestas estaban mil a uno en mi contra—. Puedes hacerle feliz de nuevo, Bella. Y creo que se le está yendo la pinza, de veras que sí.

Mi amiga no parecía estar atenta. Trazaba círculos sobre su vientre hinchado y permanecía cavilosa, mordiéndose los labios. Permaneció en silencio durante un buen rato. Me pregunté si los Cullen estarían muy lejos y si habrían oído mis patéticos intentos de razonar con ella.

"Hm…de alguna manera, no creo que estemos cerca.” dijo Carlisle.

"Sí, yo no creo que pueda estar escuchando eso sin gritar a alguien." dijo Rosalie, no estando segura de si iba a correr a gritarle al chucho o simplemente gritarle a Edward por sugerir esa idea ridícula.

—No se refería a un desconocido —murmuró para sí misma. Di un respingo—. ¿Qué fue exactamente lo que te dijo Edward? —preguntó en voz baja.

“Creo que ya lo adivinó.” Emmett se carcajeó.

—Nada, sólo pensó que tal vez a mí sí me escucharas.

—No me refería a eso, sino a lo de intentarlo de nuevo.

Comprendí que había ido demasiado lejos cuando se encontraron nuestras miradas.

—Nada.

Entreabrió la boca. —Vaya…

El silencio se prolongó durante unos segundos. Volví a fijar la vista en los pies, incapaz de mirarla a los ojos.

—Está dispuesto a hacer cualquier cosa, ¿verdad? —susurró.

"¿No está horrorizada por la sugerencia de que ella podría ser compartida?" Alice hizo una mueca.

"Eso no es..." dijo Edward, gruñéndole a ella, pero la fracción de segundo después de que él dijo nada, se enteró de que ella sólo había querido sacarlo fuera de su estado de congelamiento. Alice ahora estaba sonriéndole.

—Ya te he dicho que se le están aflojando los tornillos, y no es ninguna exageración, Bella.

—Me sorprende que no hayas compartido con los demás el secreto enseguida para meterle en un lío.

Descubrí una ancha sonrisa en su cara cuando levanté los ojos.

—Dale una vuelta al tema, ¿vale?

Hice un esfuerzo por devolver una sonrisa tan grande como la suya, pero noté que se me quedaba espachurrada en la cara. Ella conocía la naturaleza de mi oferta y no se lo iba a pensar una segunda vez. Sabía de antemano que no lo iba a hacer, pero aun así me dolió.

"Es una pena... no eres lo suficientemente bueno para ella.” Emmett se rió entre dientes

—No hay mucho que puedas hacer por mí, ¿eh? —susurró—. En realidad, no sé por qué te molestas. Tampoco soy digna de ti.

—Pero eso no va a cambiar nada, ¿verdad?

—No esta vez. —Bella suspiró—. Me gustaría ser capaz de explicártelo de modo que lo comprendieras. No puedo herirle —prosiguió, señalando su vientre con el dedo—, como tampoco podría echar mano de una pistola y dispararte. Le amo.

Las chicas sonrieron de nuevo.

"Aunque, me gustaría que pudiera coger la pistola." murmuró Rosalie, su sonrisa se convirtió en una sonrisa maligna.

—¿Por qué siempre has de querer lo que está mal?

Rosalie estaba mirando de manera glacial el libro.

—A mí no me lo parece.

Carraspeé para deshacer el nudo de la garganta y así poder conferir a mi voz la dureza suficiente.

—Confía en mí.

Hice ademán de incorporarme.

—¿Adonde vas?

Rosalie frunció el ceño, "Él no es de aquí."

—Aquí no hago bien alguno.

—No te vayas —me imploró con la manita tendida hacia mí.

Ella creaba dependencia, y fui consciente de que esa adicción tiraba de mí e intentaba que no me apartara de su lado.

Edward lucía como que no le gustaba esa frase ni un poco.

¿Qué pasa? Alice pensó hacia Edward. ¿Por qué sigues tensándote en frases al azar?

Edward negó con la cabeza, por lo que sólo ella podría saber lo que significa. Él no iba a decirle la respuesta de eso. Alice frunció el ceño, sabiendo que lo que fuera que Edward estaba pensando, que no era bueno.

—Éste no es mi sitio. Debo regresar.

—¿Por qué has venido hoy? —quiso saber, todavía con el brazo débilmente extendido.

—Sólo para saber si estabas viva de verdad. No me creía la historia de Charlie, eso de que estabas enferma.

El estudio de su rostro no me reveló si se había tragado o no mi embuste.

"Bueno, es cierto.” Dijo Emmett. "Sólo está dejando fuera la parte donde estaba planeando matar a tantos de nosotros como él pudiera."

——¿Vendrás a visitarme de nuevo antes de que...?

—No voy a merodear por aquí para verte morir, Bella.

Dio un respingo.

—Tienes razón, tienes razón. Harías bien en irte. —Me encaminé hacia la puerta—. Adiós —se despidió ella en un susurro—. Te quiero, Jake.

Estuve a un tris de regresar. Estuve a punto de dar media vuelta y postrarme de rodillas para empezar a suplicarle otra vez, pero sabía que debía renunciar a Bella y a su droga antes de que me aniquilara igual que iba a hacer con Edward.

"Bueno, eso no es un pensamiento demasiado maravilloso." dijo Emmett.

"No." Esme se estremeció.

—Claro, claro —musité mientras me marchaba.

No vi a ninguno de los vampiros. Ignoré la moto, abandonada en medio del prado, pues ahora no era lo bastante veloz para mí. Mi padre estaría loco de preocupación, y también Sam. ¿Cómo reaccionaría la manada ante el hecho de no haberme oído cambiar de fase? ¿Habrían pensado que los Cullen me habían capturado antes de tener ocasión de transformarme?

Jasper rodó sus ojos, "Creo que ellos nos entienden a nosotros lo suficiente como para saber que no lo atacaríamos así de esa manera."

Me desvestí sin preocuparme de la presencia de algún posible observador y eché a correr, desapareciendo de allí a un medio trote lobuno.

Me estaban esperando, claro, por descontado. Me aguardaban.

Jacob, Jake, corearon ocho voces llenas de alivio.

Vuelve a casa ahora mismo, ordenó el Alfa, el líder. Sam estaba furioso.

"Bueno, duh", dijo Emmett. "A mi no me gustaría que uno de mis secuaces fuera en contra de mis órdenes así como así."

"Eso es un pensamiento aterrador... Em con secuaces," Jasper se rió entre dientes.

La desaparición de Paul me indicó que Billy y Rachel estaban a la espera de saber qué me había pasado. Paul tenía tantas ganas de darles la buena noticia de que yo no había terminado convertido en comida para vampiros que no se quedó a escuchar la historia completa.

No hizo falta informar a los lobos de mi avance. Podían ver el bosque convertido en un borrón conforme yo corría alocado hacia la casa. Tampoco hizo falta decirles que acudía medio enloquecido. La repulsión impresa en mi cabeza era evidente.

Vieron todo el horror: el vientre moteado de moratones y la voz quebrada de Bella: «Él es fuerte, nada más». El rostro de Edward, la viva imagen de un hombre consumido, «observando con impotencia cómo enferma y se consume, contemplando cómo esa cosa le hace daño». Rosalie agazapada sobre el cuerpo desmadejado de la embarazada. «La vida de Bella no significa nada para ella.»

Rosalie siseó ante eso y Jasper le envió olas de calma para ella. Él estaba trabajando horas extras en este libro.

Y por una vez, nadie tuvo nada que decir.

Su estupor sonó en mi mente como un grito silencioso y sin palabras.

¡¡¡¡!!!!

Había recorrido la mitad del camino de vuelta a casa antes de que alguno se hubiera recuperado. Luego, todos echaron a correr a mi encuentro.

Era casi noche cerrada y las nubes velaban el sol crepuscular casi por completo. Me arriesgué a cruzar la autovía y lo conseguí sin ser visto.

Nos reunimos en el bosque, en un claro de árboles talados por los leñadores, a poco más de quince kilómetros de La Push. Era un lugar encajado entre las cumbres de dos montañas, lo bastante retirado como para pasar inadvertido por cualquier observador.

Los barboteos de mi mente habían degenerado en una completa algarabía, pues todos gritaban a la vez.

"Er ... no parece que vayan a tomarse bien estas noticias," dijo Emmett, no estando seguro de si debía estar sonriendo o no... todo depende de lo mal que ellos se lo tomen.

Sam tenía erizada la pelambrera del cuello y aullaba de forma incesante mientras iba de un lado para otro del círculo. Paul y Jared se movían detrás de él como sombras con las orejas pegadas a los laterales de la cabeza. Todos los lobos del círculo se habían puesto en pie, profundamente agitados, y lanzaban gruñidos por lo bajo.

El blanco de su ira no estaba claro en un principio, y llegue a creer que la descargaban sobre mí. Estaba hecho un lío y no me preocupaba. Podían hacerme lo que les viniera en gana por contravenir las órdenes.

Y entonces, el caótico conjunto de pensamientos empezó a tomar una dirección concreta.

¿Cómo puede ser? ¿Qué significa? ¿Qué va a ser esa criatura?

Nada seguro. Nada bueno. Peligrosa.

Antinatural. Monstruoso. Una abominación.

”Malditos chuchos, es solo un bebe” chillo Rosalie.

No podemos permitirlo.

"Esto es malo." Alice fue la primera en decirlo.

"Ellos van a reaccionar precipitadamente a esto.” dijo Carlisle.

Ahora, todos los miembros de la manada, salvo yo y otro de los hermanos, caminaban y pensaban de forma sincronizada. Me senté junto al otro miembro inmóvil, demasiado desconcertado como para mirar quién era ni buscar su identidad con el pensamiento mientras los demás daban más y más vueltas a nuestro alrededor.

"Creo que sé que el hermano que sería.” dijo Emmett.

"Seth... él es el único que parece realmente confiar en nosotros" dijo Jasper.

"Hey…" Emmett hizo un mohín. "Quería decir eso."

"Lo siento." Jasper se rió entre dientes, pero su risa murió rápidamente ya que la habitación se puso tensa.

El tratado no recoge esto.

Ese bicho nos pone a todos en peligro.

Intenté comprender la espiral de voces y seguir el sinuoso sendero de pensamientos para ver adonde querían ir a parar, pero no tenían el menor sentido. Ocupaban el centro de sus reflexiones unas imágenes que eran las mías, las peores de todas: los moratones de Bella y el rostro doliente de Edward.

"¿No podría haber controlado sus estúpidos pensamientos durante un minuto?" Rosalie siseó. "Deberíamos habernos dado cuenta de que esta era la manera en que los otros lobos iban a reaccionar a esto y nunca haber dejado que el chucho se largara.”

También ellos temen al feto.

"Argh… Tenías que creer que el bebé sería peligroso", Rosalie gruñó.

"Lo sien..." Edward comenzó, pero luego se detuvo. "Me pregunto si eso es lo que estoy pensando."

"Tú quieres deshacerte del bebé..." comenzó Rosalie.

"Pero no estoy seguro de si realmente estoy pensando en el bebé…" dijo Edward. "Estoy pensando que va a matar a Bella." Era difícil para él decir las últimas cosas. "Entonces otra vez... Estoy seguro de que me he convencido a mí mismo que tiene que ser un monstruo si le está haciendo eso a Bella."

Pero no van a hacer nada al respecto.

Protegen a Bella Swan.

Eso no puede influirnos.

La seguridad de nuestras familias y de cuantos aquí moran es más importante que la vida de una sola persona.

Si no la matan ellos, tendremos que encargarnos nosotros.

Hay que defender a la tribu.

Protejamos a nuestras familias.

Debemos acabar con eso antes de que sea demasiado tarde.

"Ellos deben de darse cuenta de que si hacen eso, es probable que maten a Bella." dijo Alice con dureza

Fue en ese momento cuando resonó en mi mente otra mención, las palabras de Edward: «No deja de crecer, y además muy deprisa».

Me estrujé los sesos en el intento de identificar cada una de las voces.

No hay tiempo que perder, empezó Jared.

Esto va a provocar una lucha, le previno Embry, y de las chungas.

Estamos preparados, insistió Paul.

Necesitamos contar con el factor sorpresa de nuestro lado, caviló Sam.

"Ellos no van a conseguir eso con Edward de nuestro lado.” dijo Emmett.

"No tanto... pero aún así sería una sorpresa" dijo Jasper. "Eso no sería bueno."

Si los sorprendemos cuando estén separados aumentarán nuestras posibilidades de victoria, arguyó Jared, que empezaba a trazar una estrategia.

"Claro...como si se lo podríamos tan fácil a ustedes.” dijo Jasper.

Meneé la cabeza y me incorporé lentamente. Me sentía inestable, era como si el movimiento circular de los lobos me hubiera mareado. Mi compañero también se levantó y sostuvo mi lomo con el suyo, a fin de apoyarme.

Un momento, pensé.

Dejaron de girar durante unos instantes y luego reanudaron su caminar en círculo.

Apenas hay tiempo, repuso Sam.

Pero ¿en qué estáis pensando? Esta misma tarde no ibais a atacar a los Cullen, pues no habían vulnerado el tratado, ¿o no? ¿Y planeáis ahora una emboscada a pesar de que nadie ha infringido los términos del acuerdo?

"Bueno, esto sin duda es un cambio, ¿no es así?" Emmett suspiró.

El tratado no previo esta contingencia, respondió Sam. Esto pone en peligro a todo ser humano de la zona. No sabemos qué clase de criatura van a criar los Cullen, pero sí tenemos noticias de su fortaleza y su rápido crecimiento, y también que va a ser demasiado joven como para regirse por ningún acuerdo. ¿Recordáis a los vampiros neófitos contra los que combatimos? Eran salvajes, violentos e incapaces de someterse a la razón o al constreñimiento. Imaginaos uno de esa ralea protegido por los Cullen.

"Puedo ver por qué ese pensamiento les asustaría.” dijo Carlisle.

"Eso no es lo que va a suceder" dijo Rosalie, pero ella no lucía tan convencida sobre eso.

"Realmente no lo sabemos", Carlisle le recordó. "Yo creo que seríamos capaces de enseñar al niño con el tiempo... pero no estoy seguro de lo que haría el bebé cuando nazca,."

"Nos aseguraremos de que no pase nada malo." Rosalie dijo, convencida en este momento. "Creo que ocho vampiros pueden manejar un bebé."

"Es cierto," Carlisle estuvo de acuerdo.

No sabemos si..., intenté interrumpirle.

Cierto, no sabemos, admitió él, y no vamos a correr riesgos con lo desconocido, no en este caso. Podemos tolerar la presencia de los Cullen mientras tengamos la certeza de que no van a ocasionar daños. Esa... cosa no es digna de confianza.

"Por lo menos deberías esperar y ver si eso es cierto o no, maldito idiota." Rosalie gruñó.

A ellos no les gusta más que a nosotros.

Sam tomó de mi mente la imagen de Rosalie acuclillada junto al sofá y la proyectó en la de los demás.

Algunos están dispuestos a luchar por ella sin importarles qué sea la criatura en realidad. Sólo es un crío, y se va a dedicar a berrear.

Rosalie suspiró y todo el mundo sabía que eso era cierto.

No por mucho tiempo, apostilló Leah.

"¿Qué significa eso?" Preguntó Carlisle, sus pensamientos recorrieron todo el lugar y Edward trataron de seguirlos.

Jake, hermano, este problema es grande, dijo Quil. No podemos ignorarlo.

Le dais una importancia que no tiene, argüí, la única persona en peligro es Bella.

Y nuevamente eso es por su propia elección, refutó Sam. Pero esta vez su opción nos afecta a todos.

No lo veo de ese modo.

No podemos correr semejante riesgo. No vamos a permitir que un bebedor de sangre acampe a sus anchas por nuestras tierras.

Démosles entonces la oportunidad de marcharse, terció el lobo que todavía seguía sosteniéndome para impedir mi caída. Se trataba de Seth, por supuesto.

"No creo que sería una buena idea moverla en esos momento.” dijo Carlisle.

"No creo que ellos nos den esa la opción de todos modos.” dijo Jasper.

¿Y endosar a otros la amenaza? Destruiremos a los bebedores de sangre cuando crucen nuestras tierras sin importar que su presa no sea humana. Vamos a proteger al mayor número posible de personas.

Eso es una locura, repliqué. Esta misma tarde temías poner en peligro a la manada.

Porque esta tarde ignoraba que nuestras familias corrían peligro.

 ¡No doy crédito...! ¿Cómo vais a matar a esa criatura sin acabar también con la madre? Reinó el mutismo, pero ese silencio estaba cargado de amenazas.

“No lo harán.” Dijo Emmett.

Proferí un aullido.

¡Bella también es humana! ¿No se le aplica también nuestra protección?

De todos modos, se está muriendo, pensó Leah, por lo que, en realidad, únicamente estamos acortando el proceso.

"Igual, eso no lo hace menos asesinato" dijo Jasper. "No se puede racionalizar de esa manera.”

Eso me sacó de mis casillas, me aparté de Seth con un brinco y me lancé contra su hermana con las fauces abiertas. Estaba a punto de atraparle la pata izquierda trasera cuando sentí la mordedura de Sam en el costado, obligándome a retroceder.

Aullé de dolor y rabia antes de revolverme contra él.

¡Quieto!, me ordenó con el timbre doble propio del Alfa, del líder de la manada.

Las patas se me doblaron y me removí antes de detenerme. Me mantuve en pie por un acto de pura fuerza de voluntad.

Apartó la mirada de mí.

No seas cruel, Leah, le ordenó. El sacrificio de Bella es un alto precio a pagar, y todos hemos de admitirlo así.

"¿Su sacrificio?" Rosalie siseó. "No es un su sacrificio si vas a matarla por esto... ¡Sería un asesinato!"

 Estamos aquí para actuar contra todo aquello capaz de acabar con la vida humana, y cualquier excepción a ese código de conducta es de lo más desolador. Todos nosotros vamos a lamentar la acción de esta noche.

"¿Esta noche? Así que van a atacar de inmediato" dijo Jasper.

“Que vengan” Siseo Emmett sin rastros de humor “Estaremos preparados”

¿Esta noche?, repitió Seth, muy sorprendido. Creo que deberíamos hablar del tema un poco más y al menos consultar con los ancianos. No puedes pretender en serio que vayamos a...

No hay hueco para tu tolerancia hacia los Cullen ahora ni tiempo para el debate, Seth.

"Tienen un montón de tiempo para debatir...no es que tengamos alguna idea de que harían algo como esto" dijo Jasper. "El ataque sorpresa será de gran sorpresa mañana como lo es esta noche."

 Tú harás lo que se te ordene.

Seth dobló las patas traseras y agachó la cabeza, bajo el peso de la orden del Alfa.

Sam anduvo alrededor de nosotros dos, describiendo un círculo muy cerrado.

Necesitamos a toda la manada para acometer esta misión, Jacob, y tú eres el guerrero más fuerte. Esta noche vas a luchar con nosotros, pero comprendo que esto es muy duro para ti, razón por la cual vas a centrarte en los combatientes, Emmett y Jasper Cullen. Tranquilo, no te vas a ver envuelto con... la otra parte. Quil y Embry lucharán a tu lado.

"Esa es su mejor opción, ¿no es así?" Dijo Jasper. "No hay manera de que esperaran tener éxito sin el cachorro de su lado... y no hay manera de que él sea capaz de atacar a Bella... incluso de conseguir acercarse a ella. Sin embargo, él lucharía duro para proteger sus hermanos... que tendrían que luchar todos contra nosotros ".

"Bueno, no es que fuéramos a tener algún problema", dijo Emmett, pero él estaba mirando a Rosalie. "Pero los otros lobos podrían representar una amenaza para ti."

"No hay manera de que deje que algo le pase a la Bella o el bebé," dijo Rosalie.

"Eso es lo que me da miedo", dijo Emmett, en voz baja. "Y yo no voy a dejar que te pase nada" luego añadió, "así que es probable que las cosas vayan  como lo están planeando."

Me temblaron los carpos de las patas e hice un enorme esfuerzo por mantenerme en pie mientras la voz del Alfa se imponía a mi voluntad.

Paul, Jared y yo nos encargaremos de Edward y de Rosalie, los posibles guardianes de Bella a juzgar por la información aportada por Jacob. Carlisle y Alice no han de andar lejos, y otro tanto puede decirse de Esme. Brady, Collin, Seth y Leah se encargarán de ellos. Quienquiera que tenga un acceso rápido a... la criatura, que lo aproveche. Todos nos percatamos de la vacilación de Sam a la hora de pronunciar el nombre de Bella. Destruir a la criatura es nuestra prioridad.

“Okey, todo eso es genial y bueno, pero no es como si fuera a funcionar.” Dijo Emmett, “Nosotros vamos a...”

“No.” Dijo Esme. Ella lucía con un manojo de nervios, y no soportaría seguir oyendo sobre eso un segundo mas.

“Mamá, ellos estan dispuestos a matarnos” gruño Emmett “Vendrán a matar a tu nieto”

Esme no sabía que decir ante eso y su mirada era de agonía de solo pensar que sufrirían un ataque por esto.

La manada gruñó su asentimiento con nerviosismo. Todos tenían erizada la pelambrera a causa de la tensión. Los pasos eran más rápidos y el sonido de las pezuñas sobre el suelo salino resultaba más agudo cada vez que lo arañaban.

Únicamente Seth y yo permanecimos inmóviles en el centro de una tormenta de dientes al descubierto y orejas gachas. Mi acompañante casi tocaba la tierra, doblegado por las órdenes de Sam. Percibí su pena ante el inminente acto de deslealtad, ya que Seth había luchado junto a Edward Cullen en el pasado y había llegado a convertirse en un sincero amigo del vampiro.

“Pobre chico,” Dijo Esme. “ Ellos no deberían dejarle pelear…no cuando es por algo como esto..”

Sin embargo, no albergaba intención alguna de oponerse. Iba a obedecer sin importar lo mucho que le doliera. No le quedaba otra alternativa.

¿Y cuál tenía yo? Ninguna. La manada sigue al Alfa cuando éste habla.

Sam nunca había llegado tan lejos a la hora de imponer su autoridad y yo sabía cuánto aborrecía ver a Seth postrado ante él, como un esclavo a los pies de su maestro. Jamás habría forzado la situación hasta ese límite de no haber creído que se había quedado sin elección. El vínculo mental existente entre las mentes de todos nosotros le impedía mentirnos y éramos conscientes de la sinceridad de su convicción: nuestro deber era acabar con Bella y el monstruo que llevaba en sus entrañas; él creía de veras que no teníamos tiempo que perder, y lo creía hasta el punto de estar dispuesto a morir por ello.

Supe que planeaba enfrentarse a Edward él mismo, pues Sam pensaba que el don de Edward para leernos el pensamiento le convertía en la mayor amenaza de todas. El líder no tenía intención de permitir que ningún otro asumiera semejante riesgo.

"Y ellos sabrían cómo tu pelearías", dijo Jasper, pensando en su sesión de entrenamiento y la lucha en la que Seth estuvo allí porque querían asegurarse de que todos supieran sobre eso.

A su parecer, el segundo oponente de mayor peligro era Jasper,…

“Ey…eso no es cierto.”Emmett hizo un mohín.

“Lo siento, hermano.” Jasper sonrió.

Y por eso me había emparejado con él, sabedor de que el miembro de la manada con más posibilidades de ganar en esa pelea era yo. Había reservado los objetivos más fáciles para los lobos jóvenes y Leah. La pequeña Alice no era tan peligrosa sin sus visiones del futuro guiándola…

“Eso es lo que ustedes creen.” Dijeron al mismo tiempo Alice y Emmett, pero Jasper la miró con preocupación.

"Esperaría que hubieran dado cuenta de que tu no estarías tan lejos de mí en una pelea" dijo Alice, sacudiendo la cabeza hacia él.

"No se ve como esto", dijo Jasper.

 y, en los días de nuestra fugaz alianza, habíamos llegado a saber que Esme carecía de dotes como luchadora. Carlisle podía convertirse en todo un desafío, pero su aborrecimiento hacia la violencia iba a entorpecerle.

Me puse más enfermo aún que Seth cuando contemplé cómo Sam iba desgranando su plan, analizándolo desde todos los ángulos para dar a cada componente del grupo las máximas posibilidades de sobrevivir.

Todo estaba del revés. Había estado en un tris de atacar a los Cullen esa misma tarde, pero Seth había tenido razón cuando había dicho que no estaba preparado para esa lucha. Me había dejado cegar por el odio, no me había permitido estudiar las cosas con calma porque sabía que, si lo hacía, lo vería todo de un modo diferente.

Si miraba a Carlisle Cullen sin el velo de animadversión, resultaba imposible decir que matarle no era un asesinato.

Todo el mundo parecía apreciar esa frase (incluso Rosalie, aunque por supuesto nunca lo habría admitido), pero no podía decir nada al respecto.

Era tan bueno como cualquiera de los hombres a los que protegíamos. Quizás incluso mejor. Y suponía que ocurría otro tanto con los otros aunque el sentimiento no era tan fuerte respecto a ellos, pues los conocía menos. Carlisle había renunciado a la violencia incluso para salvar su propia vida y ésa era la razón por la que podíamos matarle: él no quería acabar con nosotros, sus enemigos.

"Eso es verdad.” Carlisle suspiró.

"No la parte de matarte, sin embargo," dijo Emmett. "No dejaríamos que eso suceda."

"Esta será una pelea cerrada," dijo Jasper, lo que hizo que todos se estremecieran."Ellos no entienden totalmente cómo vamos a poner nuestras defensas... pero hay un montón de maneras que ellos podrían utilizar a través. .." se detuvo allí, sintiendo la creciente preocupación que todo el mundo estaba sintiendo.

Aquello era un error, estaba mal... y no sólo porque matar a Bella era como asesinarme a mí, como suicidarme.

Ve con los demás, Jacob, me ordenó Sam. La tribu es más importante.

Hoy me he equivocado, Sam.

En ese momento actuaste siguiendo criterios errados, pero ahora tenemos un deber que cumplir.

Me mantuve en mi sitio. No.

Sam bufó y se acercó al paso hasta plantarse delante de mí. Me miró fijamente a los ojos mientras un sordo gruñido se le filtraba entre los dientes.

SÍ, decretó el Alfa con esa doble voz suya que abrasaba con el fuego de su autoridad.

 Esta noche no hay escapatoria posible. Tú, Jacob, vas a ayudarnos en la lucha contra los Cullen. Tú, Quil y Embry os encargaréis de Jasper y Emmett. Estás obligado a proteger a la tribu, ésa es la razón de tu existencia, y vas a cumplir con esa obligación.

Me fallaron las patas y se me hundieron las paletillas cuando cayó sobre mí la fuerza de su edicto. Acabé a sus pies, tirado sobre la tripa.

Ningún miembro de la manada podía desobedecer al Alfa.
"Realmente odio eso", dijo Esme. "No me importa lo que tú digas, Carlisle... Está mal que tengan que ser forzados a hacer algo como esto en contra de su voluntad."

"Sí, estoy de acuerdo contigo." dijo Carlisle.

"Ese es el final del capítulo." dijo Esme y Jasper tomó el libro.

13 comentarios:

Anónimo dijo...

Si, me encanta.
Sigue pronto!

Unknown dijo...

Oh mi Dios... quiero mas.
No me gusta tanto esta parte ya que esta contada desde la perspectiva del perro.
Espero que salgamos pronto de él, y vengamos con mi parte favorita de la saga.

Paulina dijo...

Oh otro capítulo. Esperando el próximo.
Saludos

Paulina dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Unknown dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Támara carreño dijo...

Que bueno q actualizaron lo esperaba con ancias espero que actualicen nuevamente pronto

Támara carreño dijo...

Que bueno q actualizaron lo esperaba con ancias espero que actualicen nuevamente pronto

Unknown dijo...

Waaa!!! Un capitulo mas!!! Gracias Gracias Gracias!!! Muchas gracias a Grant por traducir y a ti por corregir y publicar!!! Espero estes bien!!!

Anónimo dijo...

J.E. BLACK CULLEN:

AL FIIIIIIIIIIIN AME EL CAPITULO, ME ENCANTO, TU AHIJADO TE ENVIA SALUDOS, ESPERO CON ANSIAS EL SIGUIENTE, VER COMO REACCIONAN LOS CULLEN CUNADO JACOB SE PONE DE SU LADO.

UNA IDEA, CUANDO JACOB SE IMPRONTA DE NESSIE, PODRIAS PONER QUE EMETT SE RIE DE EDWARD DICIENDO EL CHUCHO ES TU YERNO Y AÑADIR ESTE DIALOGO:

EMETT: BUENO MIRALO COM UN COMBO EDIE.

EDWARD: gRUÑE POR LOS PENSAMIENTOS DE EMET

jASPER: DE QUE HABLAS?

eMMTE: JACOB SERA SU HIJO, YERNO Y MASCOTA, TODO EN UN PAQUETE Y EMPIIEZA REIR.

EDWARD: CA-LLA-TE

EMMTE: NO, ES MAS QUIZAS TUS NIETOS SEA LOBOS QUE SE CONVIERTEN EN VAMPIROS O LOBITO BLANCOS O VAMPIROS QUE SE CONVIERTAN EN LOBOS, JAJAJAJAJA

ANTE ESTO ESME, EDWAR Y ROSALIE SE CONGELKARON Y SUS ROSTROS SE ILUMINARON, PENSANDO EN UNA MANADA DE BEBES REVOLOTENADO POR LA CASA.

ROSALIE: QUIZAS EL CHUCHO SIRVA DE ALGO DESPUES DE TODO.

EDWARD SE VEIA REALMENTE COMICO SU CARA ERA UNA MEZCLA ENTRE FASCINACION Y AMOR POR POSIBLES NIETOS Y ASCO POR SABER LO QUE JACOB LE HARIA A SU BEBE PARA TENERLOS.

EMMET:TE LO I MAGINASTE VERDAD? Y SOLTO LA RUISA MAS ESTRUENDOSA, TANTA QUE LA CASA ENTERA SE ESTREMECIO Y TUVO QUE SALIR DE ELLA Y EN ELPATIO DABA VUELTAS TIRADO EN EL SUELO SIN PODER CONTENERSE Y JASPER ESTABA A SU LADO LUCIENDO IGUAL.

Andreea Virginia dijo...

No creí que estuviera tan pronto ¡Muchas gracias! Estoy súper emocionada. Amo los siguientes capítulos *-*
Por cierto ¿sabes si hay algún sitio donde pueda leer el fic en inglés? Lo he buscado pero ya no aparece Si tienes el documento, ¿te importaría mandármelo? Te lo agradecería enormemente.
Un abrazo enorme,
Andreea

Anónimo dijo...

Yay, si, me encanta, lo amo!
Aunque la perspectiva del perro un un poquito aburrida para mi gusto sigo amando este libro.
Ojalá puedas actualizar rapido y así salimos lo más pronto posible de su mente precoz jajajajajajajaj
Hasta pronto :3

roCiio dijo...

Gracias Cary!!Nuestro pobre Edward va a terminar loquito...Que ganas tengo de que vean que ambas estan bien!!Soy yo o el y Rosalie estan pensando en la imprimacion de Jake con la bebe???Ummm me desconcerto eso...Ojala puedas subir otro prontito!

Lorria dijo...

los capitulos desde el punto de vista de jacob no son mis favoritos, creo que bien pudieron ser desde el punto de edward...


ver sufriendo a edward rompe mi corazon... me hace sufrir